Otra vez la marca España por los suelos
Es mejor no decirlo muy alto, pero no nos queda más remedio que reconocerlo. Los directivos españoles no entrarán en la ‘champión’ de la coordinación de grandes proyectos. El viernes pasado, el consorcio que construye el AVE a la MECA se reunió en Madrid para intentar solventar los problemas que retrasan este proyecto desde hace meses. El problema es que hay demasiados proveedores, en palabras del sector, nada menos que una docena. Uno echa la culpa al otro y éste al siguiente y así van las cosas, hasta que no queda nadie más y entonces los culpables son los chinos. Sí han oído bien, unas empresas chinas que construyen los cimientos de las vías. Un cuento chino para echar balones fuera, vamos, según reconocen varias de las sociedades implicadas. El sábado un Airbus causó cuatro muertos en Sevilla y puso en jaque el programa estrella de la construcción de este avión en la capital hispalense, el plan más ambicioso de la industria española con 31.000 millones de dotación. El inconveniente, de nuevo, está en la dificultad de coordinar todos los proveedores del aparato. Este se empezó a construir con un programa inédito en 2006 consistente en repartir el trabajo entre los clientes europeos dispuestos a comprarlo. Ahora se ve que el método no funciona y que los tres últimos directivos españoles que estuvieron al frente se marcharon sin solventar el problema. Para más Inri, hay una pelea entre varios ministerios por ver quién coloca el consejero español en Airbus. ¡Mejor que no presumamos mucho de la marcha España estos días!