Un día de infarto

En elEconomista vivimos el martes uno de los días más movidos de nuestra corta historia. Sobre la 11 de la mañana una fuente nos sopló que era inminente la fusión de Iberdrola y Unión Fenosa. A partir de ahí comenzó la tarea de confirmación. Removimos Roma con Santiago. Llamamos a los directivos de las eléctricas involucradas. Como siempre hubo de todo. Unos dijeron nos dieron largas con reuniones interminables. Otros no contestaron o nos mintieron descaradamente. Uno telefoneó unas horas después arrepentido, para cambiar su versión de los hechos. Afortunadamente, también hubo quien nos dijo la verdad, y nos confirmó la historia. Sobre las cinco y media de la tarde, la colgamos en nuestra web en rigurosa primicia. Y a partir de ahí se dispararon las llamadas. Como todas las tardes, hacia las 20:30 entré en la tertulia de Intereconomía. Uno de los colegas aseguraba que alguien se había forrado porque Iberdrola estuvo subiendo durante todo el día. Yo pensé, qué curioso, había estado tan entretenido que ni siquiera se me había ocurrido pensar que con nuestra información, privilegiada como siempre, alguien podría haber hecho un gran negocio. La conclusión a la que llegamos era contundente: las empresas se están moviendo para protegerse e impedir que sean arrolladas por las extranjeras. Pero esta vez se están haciendo bien las cosas. No es la chapuza de Montilla con la Comisión Nacional de la Energía. La política se mantiene en un segundo plano. Ojalá siga siendo así.

P.D. Lo sorprendente es lo del periódico que presume de liderar la prensa económica. Como ayer no se enteró a tiempo de la fusión, hoy la presenta en su edición escrita como una posibilidad casi remota. ¡Hay que espabilarse, amigos!

4 comentarios en “Un día de infarto”

  1. Ben dice:

    ¿Eso no es inside information, la cual es ilegal de publicar, sobre todo antes de que los accionistas sean informados?

  2. swaption dice:

    Ben, hay mucha gente con informacion confidencial. El tema es si compras.
    La CNMV deberia ver las compras de los dias anteriores y si habian algun insider metido.
    Pero eso no lo puede hacer ningun regulador del mundo, por desgracia. Demasiado curro.

  3. etica dice:

    Anda, parece que ese periódico «presumido» al final vuelve a adelantarse a la «prensa amarilla» de la economía.

    —————

    ACS niega que haya un acuerdo para fusionar Iberdrola con Unión Fenosa
    Publicidad
    Haz Click
    anapixel
    ADEMÁS

    * Encuentro: Felipe Toranzo analiza los movimientos en el sector.
    * Consulte la cotización de Iberdrola, Fenosa y ACS

    * Noticias relacionadas en elmundo.es
    * Noticias relacionadas en otros medios

    Actualizado miércoles 27/09/2006 12:24 (CET)
    Escuchar noticiaImprimirEnviar noticiaDisminuye letraAumenta letra
    EFE | EP

    MADRID.- ACS ha confirmado que ha entrado con fuerza en Iberdrola. Sin embargo, el grupo constructor y de servicios precisa que ha comprado el 6,31% del capital y que su interés es meramente «financiero», sin que haya tomado «decisión alguna para promover la fusión» entre esta compañía y Unión Fenosa, en la que posee más del 35%.

  4. paquito dice:

    Esto es un cachondeo, y amador no digas que no eres consciente que las fluctuacionesde mercado dependen de vosotros, es un sarcasmo de mal gusto.
    Esta claro que cuando hay interese, vosotros sois los primeros que ganais mucho por hacer poco

Deja tu comentario

De conformidad con la Ley Orgánica 15/1999, de 13 de diciembre, de Protección de Datos de Carácter Personal, le informamos de que sus datos serán incorporados a un fichero propiedad de EDITORIAL ECOPRENSA, S.A. (en adelante, El Economista) con la finalidad de gestionar su utilización de los blogs. Usted puede ejercitar sus derechos de acceso, rectificación, cancelación y oposición dirigiéndose por escrito a El Economista. C/ Condesa de Venadito, 1- 3º 28027 Madrid. elEconomista podrá limitar, total o parcialmente, el acceso a sus servicios a determinados Usuarios, así como cancelar, suspender, bloquear o eliminar determinado tipo de contenidos si tuviese conocimiento efectivo de que la actividad o información almacenada y/o difundida es ilícita o de que lesiona bienes o derechos de un tercero. No obstante, elEconomista no tiene obligación de controlar la utilización que los Usuarios hacen de los servicios y, por consiguiente, no garantiza que los Usuarios hagan un uso diligente y/o prudente de los mismos. Tampoco tiene la obligación de verificar y no verifica la identidad de los Usuarios, ni la veracidad, vigencia, exhaustividad y/o autenticidad de los datos que los Usuarios proporcionan sobre sí mismos. elEconomista excluye cualquier responsabilidad por los daños y perjuicios de toda naturaleza que pudieran deberse a la utilización de los servicios y de los contenidos por parte de los usuarios o que puedan deberse a la ilicitud, carácter lesivo, falta de veracidad, vigencia, exhaustividad y/o autenticidad de la información que los usuarios proporcionan a otros usuarios acerca de sí mismos y, en particular, por los daños y perjuicios de toda naturaleza que puedan deberse a la suplantación de la personalidad de un tercero efectuada por un usuario en cualquier clase de comunicación realizada a través del portal.