Un rescate problemático
Alemania ha ofrecido a España la posibilidad de cogerse a un rescate por 300.000 millones, que le permitiría financiarse de manera barata durante año y medio, aproximadamente. La propuesta tiene algunos aspectos positivos, porque llega justo hasta finales de 2013, una vez que Merkel haya celebrado elecciones generales, con lo que, en caso de ser reelegida, tendría manos libres para tomar una decisión definitiva. Pero tiene algunos inconvenientes. El primero es que, probablemente, la cantidad se queda pequeña. Y lo que es peor, que si, entretanto, se reproducen los ataques a Italia, Europa se quedaría desasistida para defenderse. Por eso, la solución propuesta ayer por el consejero austriaco del BCE para que el fondo de rescate adopte una licencia bancaria, que le permita endeudarse e incrementar su capacidad de defensa de estos países, se presenta como ideal. Lo malo es que sólo es una propuesta que cualquier día veremos desmentida por algún miembro del Bundesbank, de manera que lo que hemos rebajado hoy la prima de riesgo lo recuperemos de golpe. Es necesario una solución definitiva, no un parche tras otro. Tengo la impresión de que nos van a dar otra oportunidad de año y medio, de manera que si no cumplimos, tengamos que salir definitivamente del euro.