La morosidad de la banca cae al 6,77 % y sigue en mínimos de junio de 2011
Asimismo, el organismo ha divulgado hoy la morosidad de los créditos concedidos para la compra de una vivienda -estos únicamente hasta marzo-, que mejoró en los tres primeros meses del año hasta el 4,52 % desde el 4,69 % del cierre de 2017, en tanto que la del sector promotor e inmobiliario pasó del 18 % al 15,8 %.
El portavoz de la Asociación Española de Banca (AEB), José Luis Martínez Campuzano, destaca que los bancos españoles están haciendo un fuerte esfuerzo por reducir la morosidad en sus carteras, facilitado también por el entorno de mejora económica.
Una recuperación económica, añade, posible por la nueva financiación bancaria a empresas y familias; el fuerte aumento de la nueva financiación bancaria "no logra contrarrestar la continuidad en la reducción de la deuda acumulada por las familias en el pasado", lo que se refleja en un nuevo descenso del saldo de crédito total.
En el mismo sentido se ha pronunciado el analista de XTB Javier Urones, que explica que el descenso se basa en la recuperación económica, "principalmente en el segmento de entidades de crédito", lo que constituye "una excelente noticia".
Tanto particulares como empresas deben cada vez menos dinero a los bancos, en un ejercicio claro de una mayor capacidad de pago gracias a la mejora económica de los últimos años; pero las administraciones públicas "ayudan también desde hace varios trimestres a que esta tasa continúe a la baja", añade Urones.
Al igual que Campuzano, Urones destaca que esta reducción en la tasa de morosidad se produce en un momento en el que el volumen de crédito vivo se está contrayendo, lo cual dificulta que esta variable se reduzca a una velocidad más elevada.
Cabe esperar que con la mejora económica y el traslado de precios al sector inmobiliario se logre aumentar el volumen total de crédito, por lo que no se puede descartar que la tasa de morosidad pueda bajar incluso por debajo del 6 % en lo que resta de ejercicio, concluye.
Por lo que respecta al descenso de la morosidad bancaria, obedece en su mayor parte al recorte de los créditos impagados, que bajaron a 826.349 millones de euros desde los 832.930 millones del mes anterior.
Los créditos que todas estas entidades tenían concedidos a cierre de abril también disminuyeron, ya que sumaban 1,219 billones frente a los 1,224 billones del mes anterior.
Segregados por tipos de entidades, los datos de bancos, cajas y cooperativas- separados de los de los establecimientos financieros de crédito (EFC)- mostraban una morosidad del 6,79 %, frente al 6,81 % de marzo.
Los EFC, por su parte, presentaban en abril una tasa de mora del 5,96 %, la misma que en marzo, con una cartera crediticia de 45.627 millones de euros, de los que 2.720 millones de euros eran de dudoso cobro.
En cuanto a la morosidad de los créditos destinados a la compra de vivienda, mejoró en los tres primeros meses del año hasta el 4,52 % desde el 4,69 % del cierre de 2017, en tanto que la del sector promotor e inmobiliario pasó del 18 % al 15,8 %, según los datos publicados hoy por el Banco de España.
El crédito destinado a la compra de una vivienda sumaba 500.309 millones a cierre de marzo, 2.718 millones menos que un trimestre antes, lo que, además de al citado efecto se explica con el incremento de las amortizaciones, es decir, con el lento desendeudamiento de las familias.
Dentro de esta cartera, las hipotecas morosas o impagadas se habían reducido a cierre de marzo hasta 22.659 millones de euros, 946 millones menos que el periodo anterior, recorte que también influye en el cálculo de la mora.
Por otra parte, la morosidad del crédito concedido al sector promotor inmobiliario se redujo considerablemente al finalizar marzo, hasta el 15,8 %, tanto en relación al trimestre anterior, cuando se situaba en el 18 %, como si se compara con el mismo periodo de 2017, cuando era del 21,4 %.
El crédito concedido por las entidades a estas empresas se redujo en marzo a 101.338 millones, frente a los 109.998 millones de diciembre de 2017, 8.660 millones menos; de ellos, 12.652 eran morosos, casi más de 7.200 millones menos que al cierre del año anterior y la mitad de los 25.002 del mismo periodo del año anterior.