UGT-Andalucía ignora a Cándido Méndez al elegir nueva líder

UGT Andalucía se ha revuelto contra la dirección del sindicato que dirige Cándido Méndez, quien presionó para que el ex secretario general Francisco Fernández abandonara el cargo en noviembre por el escándalo de las facturas falsas. Y eligió ayer a Carmen Castilla como nueva líder. Castilla logró el respaldo del 83% de los delegados del comité extraordinario, máximo órgano entre congresos.

Precisamente un congreso para elegir al nuevo secretario andaluz es lo que la dirección estatal prefería. José Javier Cubillo, secretario de Organización de UGT que acudió al comité de ayer en Sevilla, así lo manifestó argumentando que era la mejor fórmula para dar "satisfacción a los órganos internos del sindicatos y a la opinión pública".

La nueva líder, enfermera de 45 años que en la pasada década fue una relevante dirigente crítica del PSOE de Sevilla hasta que el partido la colocó como empleada en el hospital Virgen Macarena de Sevilla para que recondujera su postura, defendió la legitimidad de su elección por el comité. Señaló que obtuvo 98 de los 118 votos posibles y que, además, en un congreso se exige un 51 por ciento de respaldo, mientras que en el comité se precisa de un mínimo del 67 por ciento. Obvió decir que en un congreso asisten las facciones críticas, excluidas del comité actualmente.

Transparencia y credibilidad

Todos los partidos políticos andaluces expresaron su deseo de que el sindicato sea transparente y recupere su credibilidad tras su implicación en el 'caso ERE', donde tiene a una decena de militantes o exaltos cargos imputados, y en el de las facturas falsas cargadas a programas de formación para desempleados de la Junta. Ambos son investigados por la juez Mercedes Alaya de Sevilla. La Junta de Andalucía, por su parte, ya le ha exigido la devolución de 1,8 millones.

En la nueva directiva no queda ningún miembro ligado a los dos antecesores de Castilla: Fernández y Manuel Pastrana.