"La llegada de La Caixa es un primer paso para la futura venta de Xtraice"
- "Vamos a invertir en internacionalizar más y mejor en EEUU"
- "Tendremos que abrir de nuevo nuestro capital en dos años"
Adrián Ortiz, joven ejecutivo de 28 años, es hijo del fundador de Xtraice, el líder mundial en pistas de hielo sintético. La compañía sevillana ha captado 800.000 euros de La Caixa para lanzarse a crecer en el exterior y quintuplicar ventas.
Xtraice, compañía sevillana que lidera el mercado mundial de pistas de hielo sintético ecológico, ha dado entrada al fondo Caixa Capital Risc en su accionariado. El vehículo gestionado por la entidad catañana, que es el primer grupo financiero de Andalucía, ha comprado el 20 por ciento por 800.000 euros.
P. ¿Cómo se gesta la entrada de La Caixa en la empresa?
R. El año pasado nos dieron en Barcelona el premio Empresa XXI, que patrocina esta entidad y el ministerio de Industria. En ese momento estábamos estudiando cómo lograr capital para poder crecer más rapido de lo que lo veníamos haciendo desde que nacimos hace ocho años. Teníamos una propuesta del fondo de capital riesgo público andaluz Invercaria, y en paralelo nos llegó también la posibilidad con La Caixa. Nos tomamos 2011 para estudiar bien lo que necesitábamos y llegamos a la conclusión de que eran 800.000 euros para los próximos cuatro años, y por eso decidimos que sólo precisábamos un socio. Y nos decantamos por La Caixa, pese a que estamos muy satisfechos del trabajo que Invercaria hizo con nosotros.
P. ¿Qué es lo que vais a hacer con estos fondos?
R. Hasta ahora hemos crecido con nuestros propios recursos más la aportación inicial que hizo mi padre con un grupo de socios de 60.000 euros. Ahora nos vamos a volcar en marketing fuera de España. Invertiremos en mejorar nuestro posicionamiento web, en asistir a todas las ferias especializadas posibles y en contratar a nuestros propios distribuidores.
P. ¿Por qué serán propios?
R. Hemos tenido alguna mala experiencia, como por ejemplo con el distribuidor que teníamos en Francia, que en 2009 nos vendió un millón de euros, pero al año siguiente se quedó con la cartera de clientes para venderles producto chino. Queremos controlar esto nosotros.
P. ¿Qué más os aporta la llegada de La Caixa?
R. Nos obligará a ser más profesionales, más rigurosos en la gestión económica. El consejo de administración, por ejemplo, lo hemos remodelado aunque sigue siendo pequeño. Antes nos sentábamos mis padres y yo; ahora mi padre [Francisco Ortiz] es el presidente, centrado en estrategia, yo soy el consejero delegado y hay un tercer miembro de La Caixa. También comenzaremos a capitalizar el trabajo que venimos haciendo, ya que nunca hemos repartido dividendo y ahora tendremos que hacerlo. En el fondo, esta primera llegada de un socio externo es el primer paso para la venta futura de la sociedad en unos años, quizá a una multinacional o a otro fondo de capital riesgo. No significa que vayamos a vender toda la empresa, es posible que La Caixa se quedara con un porcentaje y mi familia también permaneciera.
P. ¿Cuáles son vuestros objetivos durante los próximos cuatro años?
R. Actualmente, incluyendo a nuestras sociedades de Uruguay y EEUU que controlamos al cien por cien, facturamos dos millones al año. Queremos alcanzar los 10 millones en 2016 internacionalizándonos aún más. Y creo que es un objetivo totalmente factible. En Francia, nosotros solos este año, vamos a vender medio millón. Y, además, hasta ahora nos venimos centrando sobre todo en el mercado del ocio, hemos empezado a entrar en el deportivo y nuestro gran reto será el doméstico.
P. ¿Qué queréis hacer en cada uno de esos segmentos?
R. En ocio tenemos múltiples referencias, quizá la más conocida la pista de DisneyWorld Paris. En el campo deportivo hemos vendido pistas al equipo de hockey de Florida, entre otros. Y hay que tener en cuenta que sólo en EEUU hay siete millones de personas federadas en hockey sobre patines. Y el mercado doméstico es una especificidad de EEUU, donde tenemos casos de usuarios que nos compran con una tarjeta de crédito una pista por 20.000 dólares para usarla todo el año en su casa. En todos los estados que rodean los grandes lagos es tradición crear tus propias pistas de hielo natural aprovechando el frío, pero con el cambio climático esas pistas cada año se mantienen menos meses. Nuestras plazas de hielo sintético low cost son una solución ideal para esta demanda, ya que pueden usarse todo el año. También existe mercado, aunque menos desarrollado, en República Checa, Rusia o países nórdicos.
P. ¿Qué es lo prioritario entre todos estos segmentos y países?
R. Hay que afianzar en ocio y deportivo. Para abordar el mercado doméstico en condiciones necesitaremos más recursos, y por eso pensamos abrir una segunda ronda de captación de capital en uno o dos años. Hay que tener en cuenta que un anuncio en condiciones en la teletienda de EEUU cuesta un millón de dólares, por ejemplo.
P. ¿De qué se compone vuestro hielo y dónde se produce?
R. La fórmula es secreta. Es un plástico sintético autolubricado. Lo producimos en una fábrica de Valencia, en la que participamos accionarialmente para garantizar que la formulación del material no salga de allí. Luego lo mecanizamos en otra factoría de Écija (Sevilla) y ya directo al cliente. Nos ha ocurrido que algún distribuidor, como el gigante japonés Mitshubishi, ha intentado copiarnos. Por eso no hemos dejado de innovar, sacando mejoras todos los años que han desanimado a la competencia. Si no, nos hubieran aplastado literalmente hace mucho tiempo.