Hoy se publicará el IPC de junio en EEUU, para el que se espera un 0,5%. Pero cunde el temor a que salga peor de lo esperado, después de la cifra de precios de producción conocida ayer: el 0,5% cuando se esperaba el 0,2%. Lo han adivinado: el petróleo ha sido el culpable de esta aceleración, en este caso acompañado por la alimentación. Al excluir estos factores, la tasa subyacente sí cumplió las expectativas de un 0,2%, lo cual supone un alivio para la Reserva Federal. Pero si el IPC subyacente supera hoy el 0,4%, Bernanke se enfrentará a un problema muy serio, cuando la actividad empieza a dar signos de agotamiento. Cada vez más analistas hablan de estanflación, incluso en España.