Sesión para deleite de los alcistas en la renta variable, que recibió un espaldarazo desde todos los frentes que no pueden empañar los resultados de Google conocidos al cierre. Situación de corto plazo: Al cierre, y pese a los resultados de Google -que se hundió un 10%-, el mercado dio un importante paso adelante en lo técnico que sería bueno confirmase mañana el Nasdaq 100 en gráfico semanal. Los resultados KLA y Microsoft, bien recibidos aunque sin estridencias, parecen de hecho poder compensar (el futuro del S&P recuperó completamente la corrección forzada por Google, aunque no el del Nasdaq 100). Pero es que la de ayer fue una gran sesión en lo técnico por diferentes motivos: el Nasdaq 100 rompió los máximos del pasado ejercicio con hueco, marcando niveles no vistos desde 2001, y el Dow Jones perforó brutalmente su resistencia creciente para dejar de ser una cuestión pendiente. Pero es que además todo eso se solucionó con volatilidad decreciente, que marcó mínimos de los últimos meses, y por fin con un euro/dólar rompiendo importantes resistencias y los bonos corrigiendo con cierta intensidad para poner sobre la mesa un nuevo intento de vuelta semanal y fallo alcista en la previa. Con todo ello sobre la mesa sólo se puede decir que los alcistas vivieron un día grande para la renta variable y que sus tendencias se refuerzan. Situación tendencial: El patrón envolvente alcista desplegado en octubre sobre la media móvil de 200 semanas pone sobre la mesa un suelo antes de que se alcancen los 1.000 puntos. La gran corrección del verano podría ser un acontecimiento que encaja a la perfección en una estructura de continuidad alcista, poco habitual y propia de mercados muy fuertes como el que habría nacido en marzo de 2009 y que llevaríamos corrigiendo lateralmente durante más de un año. Mantenemos la idea de que el mercado tiende a su máximos histórico para el conjunto; circunstancia que ya lograron el Russell 2000 y el Dow Jones Transportes a principios de ejercicio.