En agosto les advertíamos del aspecto técnico bajista que presentaba el índice del sector bancario del Eurostoxx 600.
Pues bien, después de unas semanas en las que este índice formó un rebote, que habilitó que recuperara un 12% desde mínimos, todo apunta a que la tendencia bajista, que ya nos dio algún que otro escalofrió en pleno verano, se está reanudando. Seguimos teniendo fijada la vista en objetivos que aparecen en los 420 puntos, esto es, los mínimos de junio de 2006 y el objetivo de caída mínimo de un amplio patrón de techo del cual ya les hablamos en su momento. Esto significa un recorrido adicional de caídas de un 7% desde niveles de cierre del viernes pasado. Si esto se confirma, entendiendo que éste es el escenario más probable siempre y cuando el índice bancario no supere los máximos de la semana pasada en los 475, cabría esperar que en próximas semanas la tendencia alcista que define la renta variable a lo largo de los últimos meses, pueda sufrir algún que otro resfriado. De ahí a que llegue una gripe todavía falta bastante trecho. Efectivamente, no pondremos en duda que la tendencia es alcista y que sigue plenamente vigente pero no queremos pasar por alto muchas evidencias técnicas que apuntan a que podríamos asistir en próximas semanas a una fase que sirva para corregir parte de las últimas y fuertes subidas. Como siempre el que manda es el precio por lo que nos serviremos del mismo para acotar las referencias de soporte críticas cuya cesión confirmaría a corto el reseñado giro bajista. Estas son los 13.400 puntos en el Dow Jones Industrial y los 4.330 puntos en el Eurostoxx 50. Mientras no se pierdan no abandonemos el barco aunque preparen los salvavidas por si hay que saltar por la borda rápidamente.