El índice Nikkei ha cerrado la sesión con una caída del 1,65%, hasta los 9.449,47 puntos, lo que no deja de ser algo normal si tenemos en cuenta las fuertes y verticales subidas de estos últimos días que han permitido al índice japonés recuperar algo más del 50% del último movimiento bajista que se inició en los 10.770 puntos.