Recaída para la renta variable europea, de la que no escapó nuestro mercado lógicamente, ......y que refuerza la idea de un pull-back como paso previo a un test a los 9.750 puntos. Situación de corto plazo: Sugeríamos ayer que el entorno no permitía estar muy seguros en la idea de un pull-back, que sin embargo tomábamos como idea de corte operativo al llevar a cabo el cierre parcial de Telefónica, Repsol e Iberdrola en plena subida para reducir la exposición. El movimiento al alza, sobre todo en términos de volumen, parecía tener poca credibilidad; siendo el entorno europeo, con un DAX30 marcando máximo anual, el que permitía tener alguna esperanza de evitar un test a la zona de soporte clave, que sigue estando en los 9.750 puntos del principal índice español. Con la renta variable internacional cerca de importantes soportes, ésta parece que será el elemento que nos permitirá valorar la capacidad de aguante del último de los soportes que mantienen la estructura de la tendencia iniciada en junio si es que bajamos a encontrarnos con el último de los tres niveles de demanda relevante que podían establecerse para nuestro principal índice en el momento en que se atacaban los 11.000 puntos, resistencia que ha mantenido al IBEX 35 bajista en la tendencia de corto-medio plazo como hemos mantenido en todo momento desde el análisis de la situación tendencial. Situación tendencial: El IBEX 35 se mantiene en un proceso correctivo del gran alza de 2009, pero desplegando continuos mínimos crecientes en gráfico semanal, lo que sugiere que los mínimos de junio -donde el índice llegó a corregir dos terceras partes del alza previa- podrían haber supuesto el final de la reacción bajista al espectacular rally comprador que llegó tras el hundimiento de 2008; dejando al mercado listo para trabajar una reestructuración en tendencia. Esta inercia se rompería en caso de perforación de los 9.750 puntos.