En el ecuador de la sesión nos encontramos ante una jornada en la que se nota la tensión en el ambiente y en la que los principales índices europeos se mueven de forma mixta sin decantarse de forma clara ni por las alzas ni por las bajadas.
Técnicamente, lo más destacable ha sido ver como los índices europeos de forma general se han alejado de sus respectivos soportes clave, como son los 2.820 puntos del EuroStoxx 50, lo cual da un margen de caída a una hipotética reacción bajista tras la reunión de la Reserva Federal, que muy probablemente será el catalizador de un movimiento que podría darnos la dirección del próximo movimiento en la renta variable no ya solamente a corto sino a corto-medio plazo.