Las cosas no son como empiezan sino como terminan. Empezó mal la cosa con las cesiones del lunes, pero quedaban cuatro jornadas para rectificarlo y apoyar la vela martillo semanal que se había desplegado en la semana previa tal y como el pasado viernes comentamos desde aquí para sostener que algo podía a estar cambiando nuevamente y que podía frenar la peligrosa ofensiva bajista que se inició en los 2.800 puntos del EuroStoxx 50.
Al cierre semanal, los índices dejaron una muy fuerte vela blanca que nos habla de que siguen ahí, que no hay que dar las cosas nunca por hechas mientras la tendencia no las apoya, y que mientras no se demuestre lo contrario, nos mantenemos en un proceso lateral dentro de una tendencia de orden superior de tipo alcista que arrancó en marzo de 2009.