Resiste el hueco abierto por el Nasdaq 100 hace cuatro semanas
Situación de corto plazo:
Las líneas de vela que desplegaron la semana anterior los principales índices estadounidenses, conocidas en el argot técnico oriental como estrellas fugaces, advirtieron de un agotamiento alcista a corto plazo que podría provocar una cierta consolidación de parte de los últimos ascensos, tras la cual seguimos favoreciendo una continuidad alcista hacia objetivos que en el Nasdaq 100 (NDX100.NQ) manejamos en los 7.820 puntos, que es el techo del canal alcista que viene acotando las subidas del índice tecnológico a lo largo de los últimos meses.
Son los índices tecnológicos los que están sufriendo mayor volatilidad a corto plazo y podríamos ver aún caídas hacia los 6.950 puntos de Nasdaq 100 que no pondrían en cuestión la continuidad de las alzas, pero por el momento lo más destacable es que resiste su directriz alcista de aceleración que discurre por los 7.200 puntos y el hueco alcista abierto hace cuatro semanas desde los 7.207 puntos.
Sea desde los mínimos de las últimas sesiones, o desde los mínimos de junio, seguimos confiando en que estamos ante una simple pausa y en un escenario de continuidad alcista en próximas semanas. En el caso del S&P 500 (SP500.CH) lo normal sería que asistiéramos a una subida hacia su zona de altos históricos y origen de la última fase correctiva en los 2.872 puntos antes de que encuentre dificultades para seguir al alza.
Situación tendencial:
La tendencia alcista que definen los principales índices norteamericanos desde el año 2008 / 2009 se mantiene del todo vigente y por el momento no vemos nada que plantee un techo sostenible en el tiempo dentro de la misma por lo que lo más probable es que las alzas, correccioneso consolidaciones al margen, tengan continuidad en próximos meses.
Solamente se pondría en jaque esta hipótesis alcista si los principales índices norteamericanos pierden los soportes que hemos calificado como soportes "urbi et orbi", que son la base de la última consolidación en los mínimos que marcaron el pasado 9 de febrero, tales como son los 2.532 del S&P 500 o los 6.164 puntos del Nasdaq 100,que son la línea divisoria que separa una consolidación, del todo normal en tendencia, de una corrección que pondría en jaque la continuidad de la tendencia alcista en Wall Street.
