Situación de corto plazo:
Los índices tecnológicos estadounidenses alcanzaron ayer los máximos que alcanzaron el pasado 13 de marzo, que son sus actuales altos históricos y el origen de la última corrección relevante. Es del todo normal que el alcance de esta zona de resistencia de los 7.185-7.200 puntos en el Nasdaq 100 (NDX100.NQ) provoque ciertas dudas pero consideramos que es cuestión de tiempo que acabe superándola para dirigirse a buscar el techo del canal que viene acotando a la perfección los ascensos de los últimos meses, que actualmente aparece por los 7.400 del Nasdaq 100. Hasta ahí no debería encontrar demasiadas dificultades para seguir subiendo.
A corto plazo estamos pendientes de ver si el S&P 500 y el Dow Jones Industrial consiguen batir resistencias de corto plazo, como las que superaron los índices tecnológicos el viernes pasado y que a la postre ya nos advirtió de una vuelta a los altos del año. Para ello el S&P 500 (SP500.CH) debe superar resistencias de 2.752 puntos y el Dow Jones Industrial (DJI.NY) batir los 25.086 puntos.
Situación tendencial:
La tendencia alcista que definen los principales índices norteamericanos desde el año 2008 / 2009 se mantiene del todo vigente y por el momento no vemos nada que plantee un techo sostenible en el tiempo dentro de la misma por lo que lo más probable es que las alzas, correcciones o consolidaciones al margen, tengan continuidad en próximos meses.
Solamente se pondría en jaque esta hipótesis alcista si los principales índices norteamericanos pierden los soportes que hemos calificado como soportes "urbi et orbe", que son la base de la última consolidación en los mínimos que marcaron el pasado 9 de febrero, tales como son los 2.532 del S&P 500 o los 6.164 puntos del Nasdaq 100, que son la línea divisoria que separa una consolidación, del todo normal en tendencia, de una corrección que pondría en jaque la continuidad de la tendencia alcista en Wall Street.