En el ecuador de la sesión nos encontramos ante una jornada en la que los principales índices europeos, después de unas primeras horas de negocio donde se mantuvo la inercia compradora previa, están corrigiendo posiciones en lo que tiene visos de ser un simple ajuste de parte del fuerte alza desarrollada desde los mínimos del pasado lunes.
Este ajuste de corto es algo normal tras la subida vertical de los últimos días y no consideramos que reabra el potencial bajista que quedó muy mermado tras verse cerrados ayer los distintos huecos bajistas que se abrieron de forma general el pasado viernes. El cierre de estos huecos ha sido una nueva demostración de fortaleza de los alcistas y ahora a la presión compradora solamente le resta dar la puntilla consiguiendo marcar nuevos máximos anuales. Con todo, seguimos pensando que aunque se haya alejado considerablemente el riesgo de asistir a una corrección sensible, se mantiene el riesgo de que estemos delante de un proceso consolidativo correctivo que podría durar semanas y en la que los índices se movieran un 10% arriba y abajo.