Al cierre europeo los alcistas dan un golpe sobre la mesa y consiguen finalmente imponerse con claridad en una sesión que tiene visos de que pueden haberse sentado las bases de un movimiento al alza que podría tener como primer objetivo la zona de máximos de hace dos semanas y posteriormente los máximos alcanzados a finales de octubre. Hablamos, en el caso del IBEX 35, de niveles como son los 8.900 y los 9.400 puntos.