Gente

Rajoy, un peregrino feliz: termina un día más tarde el Camino de Santiago y su ciudad le recibe como un triunfador


Informalia

La plaza del Obradoiro de Santiago de Compostela reunió este martes a más gente de la habitual por estas fechas, y el motivo no fue otro que la presencia del expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que llegó al lugar tras su peregrinación por el Camino Francés. Ataviado con sencilla ropa deportiva y un sombrero para protegerse del sol, saludó a los presentes que se acercaron a saludarle. Junto a él estaban su hermano Enrique y uno de sus hijos, Juan -nacido en 2005, fruto de su matrimonio con Elvira Fernández-, un amigo de éste y su hermano Enrique.

El que fuera el jefe del Ejecutivo entre los años 2011 y 2018 llegó a la plaza gallega sonriente y agradecido por el baño de multitudes que allí le esperaba, destacando, sobre todo, la presencia de adolescentes. El exmandatario explicó cómo había vivido su etapa, e incluso rio las gracias a una mujer que bromeó con una de las míticas frases que el expresidente verbalizó durante su mandato: "Muchas tardes y buenas gracias".

Durante el tiempo que duraron los encuentros en la plaza con simpatizantes y peregrinos, los acompañantes de Rajoy se mantuvieron en un discreto segundo plano.

Después, intentaron acceder a la Catedral de Santiago de Compostela para presenciar la tradicional misa del Peregrino, pero la cola era tan larga que, en su lugar, pusieron rumbo a la Oficina de Acogida al Peregrino, donde recogieron la Compostela.

El expresidente recomendó "a todo el mundo, político o no", realizar el Camino de Santiago. Eso sí, apuntó la importancia de hacerlo "con tiempo y ganas". "Que antes se preparen un poco", afirmó, después de posar con el certificado.

El expolítico salió el pasado jueves 12 de junio de Sarriá, donde comenzó el Camino Francés, en el que, más allá de demostrar que está en plena forma, también tuvo tiempo para descansar y disfrutar de algún manjar. "En Galicia comemos muy bien", dijo al respecto.

Así lo demostró en su parada en en un conocido restaurante de la localidad de Melide, donde disfrutó de los platos tradicionales de su tierra. Cabe decir que se esperaba su llegada a su destino un día antes, el lunes 16.