Paz Padilla responde a la polémica de la raspa en Zahara con un comunicado rotundo: "Afirmaciones falsas y comentarios ofensivos"

Paz Padilla protagoniza una nueva polémica. Esta vez, en su tierra, a raíz de registrar oficialmente el logo de su marca de ropa NoNiNá. Se trata de una raspa de pescado, símbolo tradicional de la zona que los comerciantes de Zahara de los Atunes han utilizado en sus comercios durante décadas sin reclamar exclusividad. Sin embargo, a partir de ahora, las marcas de ropa ya no podrán estamparlo en sus prendas ni complementos y los vecinos de la zona acusan a la humorista de "apropiación cultural indebida".

Tras las quejas de los comerciantes, Paz Padilla ha emitido un comunicado este jueves a través de su despacho de abogados para explicar lo sucedido y defender su actuación: "Nuestro cliente es titular de diversos registros de marca para las marcas Noniná que incluyen, entre otros elementos, un diseño característico de raspa de pescado. Dichas marcas están protegidas por la legislación vigente desde el año 2019 y constituyen parte fundamental de la identidad comercial de su establecimiento", reza el texto.

Aseguran que, teniendo constancia de ciertas situación de confusión en los consumidores que habían adquirido prendas con la raspa en un establecimiento pensando que eran de la firma Noniná, pusieron el hecho en conocimiento de este comerciante a través de un burofax, invitándole a llegar a un acuerdo amistoso y cordial, algo a lo que él accedió. Sin embargo, días después, se han topado con que el conflicto había llegado a los medios de comunicación y tildan de falsas las acusaciones del empresario, asegurando que la campaña pública que lidera está basada en "afirmaciones falsas" y "comentarios ofensivos": "No se ha interpuesto acción judicial alguna hasta la fecha. (...) No se ha solicitado la retirada de todos los productos del establecimiento. (...) No se pretende la apropiación generalizada del concepto 'raspa', afirmación infundada y carente de todo valor, pues existen diseños convivientes de raspas en el mercado y en el registro de marcas".

Añaden, por último, que la intención de Paz Padilla era únicamente "proteger sus legítimos derechos de propiedad intelectual" y que el envío de "requerimientos extrajudiciales" como un burofax es un "procedimiento habitual en estos casos".

Las explicaciones de su hija, Anna Padilla

Anna Padilla, la hija de la humorista y copropietaria de la marca, también se ha pronunciado a través de su perfil de Instagram, aclarando cómo funciona la propiedad intelectual: "Noniná y nuestro logo es una marca registrada. Entonces, tenemos registrado la marca, nuestro logo, incluso algunas de las frases nuestras que solemos utilizar. Esto es muy común en esta industria. Solo está registrado como marca de ropa y complementos. Entonces, no puede existir una marca que se llame Noniná", ha comenzado explicando.

Y ha añadido: "Lo mismo pasa con la raspa. No es todas las raspas del mundo, ni todos los atunes. Es nuestra raspa con nuestra forma. Nosotras, cuando creamos la marca hace seis años, lo registramos y es un proceso que incluso lleva tiempo. Al final, para que te den el okey, tienen que revisar que ninguna otra marca en tu sector que utilice algo parecido. Esta medida lo que hace es proteger tu imagen, ya que pueden utilizar tu raspa para algo negativo o para lucrarse de la imagen de tu marca".

Paz Padilla, por su parte, ha enviado un mensaje a través de Raquel Bollo, tertuliana de TardeAr: "Me ha trasladado algo para que lo digamos, es un poco más de lo que contamos sobre la legalidad... Esa tienda tiene otras raspas, piden que quite la que es igual o casi igual que la de su marca. La tienda está a 200 metros y ella fue a verlos en plan 'Yo voy a entrar antes de llegar a nada para hablar con la jefa'".