Karla Sofía Gascón rompe su silencio en la presentación de su novela: "Comienza con una persona que se está suicidando"
- "He visto a muchísimas personas hablar de mí sin conocerme, decir que era la señora de Vox, la racista", ha dicho
- "Lo único que se quería era eliminarme, por eso preferí apartarme"
- Las lágrimas de Karla Sofía Gascón al recoger su último premio: "A algunos les hubiera gustado verme en un árbol quemándome"
Informalia
Han pasado semanas desde que Karla Sofía Gascón se vio envuelta en la polémica por unos tuits rescatados de su pasado que sacudieron la industria cinematográfica en plena carrera hacia los Oscar. Tras un silencio estratégico, la actriz madrileña ha reaparecido en Madrid para presentar Lo que queda de mí, su nueva novela, un proyecto literario que, según sus propias palabras, nació "de un momento muy difícil" de su vida: "Como ahora en esta última etapa, me encontré en una situación muy complicada".
La presentación de Lo que queda de mí ha sido, en muchos sentidos, un acto de catarsis para la actriz. Un intento de cerrar un capítulo turbulento de su vida y centrarse en lo que le queda por delante. Aunque, como ella misma reconoce, su vena justiciera sigue intacta.
El acto, celebrado en la sede de la editorial Almuzara, no ha sido solo una presentación literaria, sino también la oportunidad para Gascón de responder a la controversia que la ha perseguido en los últimos meses. Con la sala llena de periodistas, la actriz se ha mostrado reflexiva, contundente y, por momentos, irónica.
Entre la realidad y la ficción: "El lector tendrá que averiguar qué es verdad y qué no"
Karla Sofía Gascón ha querido dejar claro desde el principio que Lo que queda de mí no es una autobiografía, aunque sí contiene elementos inspirados en su vida. "El lector tendrá que averiguar lo que es verdad y lo que no", ha explicado, reconociendo que en sus páginas hay "muchas partes de mí, obviamente muchas".
La novela arranca de forma impactante. "El libro comienza con una persona que se está suicidando", ha revelado la actriz, aunque admite que no recuerda exactamente ese primer fragmento. A partir de ahí, el protagonista hace un repaso de su vida, una estructura que le ha servido a la propia Karla Sofía para reflexionar sobre su pasado.
Uno de los aspectos más llamativos de la historia es la relación de la protagonista con una senadora mexicana, lo que añade una capa política a la narración. "Yo estaba en una relación muy complicada con una senadora de la República de México, aparte de con mi mujer aquí en España. Creo que el libro tiene cosas muy interesantes de la política y de cómo lo viví", ha comentado.
Además, ha destacado que la obra está impregnada de un humor particular: "Tiene muchísimo humor negro, ironía, sarcasmo, algo que no se entiende últimamente, por lo que me he dado cuenta".
"Soy menos racista que Gandhi y menos de Vox que Echenique"
Era inevitable que las preguntas derivaran hacia la polémica que ha marcado su carrera en los últimos meses. En enero, la actriz fue criticada por una serie de mensajes antiguos en redes sociales en los que se expresaba de forma ofensiva sobre diversas cuestiones, incluyendo la comunidad musulmana, George Floyd y la diversidad en los premios de la Academia de Hollywood. Las consecuencias fueron inmediatas: Netflix la apartó de la promoción de Emilia Pérez y la editorial Dos Bigotes canceló la reedición de su autobiografía.
Con un tono desafiante, Gascón ha zanjado el asunto con una frase categórica: "Si queréis un titular, podéis decir que soy menos racista que Gandhi y menos de Vox que Echenique".
A pesar de las críticas y el daño sufrido, la actriz no se arrepiente. "Siempre digo que repetiría lo mismo, aunque me haya dolido, aunque haya sufrido, aunque haya estado destrozada y aunque haya estado a punto también de volver a repetir este libro. Yo siempre repetiría lo que me pasa en mi vida, porque si no, no sería yo y no aprendería ciertas cosas que tengo que aprender".
No obstante, reconoce que ha sido un proceso duro: "El odio no se puede combatir con más odio, aunque es a lo que estamos acostumbrados y yo he sido así siempre. Yo he sido muy justiciera muchas veces y una persona a la que le ha gustado también tomarse la justicia por su mano".
Cuando le han preguntado si eso ha cambiado, su respuesta ha sido clara: "El libro se titula Lo que queda de mí, un poco vengativa sigo siendo".
"¿Cuántas veces tengo que pedir perdón?"
Sobre si siente que ha sido perdonada, la actriz ha respondido con firmeza: "No creo que nadie me tenga que perdonar nada". Para ella, la controversia que la rodeó fue fruto de la hipocresía y la desinformación. "He visto a muchísimas personas hablar de mí sin conocerme, decir que era la señora de Vox, la racista. Me han puesto calificativos de todo tipo sin conocerme en absoluto, simplemente porque les han hecho creer eso o han preferido creer eso".
Uno de los aspectos que más le han dolido es la acusación de estar "blanqueando el nazismo", algo que rechaza tajantemente. "Intentar explicar esto en una vorágine en la que lo único que se quería era eliminarme habría sido imposible. Por eso preferí apartarme".
Gascón está convencida de que la polémica no fue casualidad. "Que escogieran justo las palabras adecuadas para intentar hacer daño no es una cosa casual. Eso es una cosa intencionada". Y ha dejado clara su postura respecto a sus tuits: "A las personas musulmanas les tengo un respeto enorme. Lo que no tengo respeto es al fanatismo ni al terrorismo".
El respaldo de la industria y el silencio sobre Emilia Pérez
A pesar del escándalo, la actriz asegura haber recibido el apoyo de muchos compañeros de profesión. Sin embargo, ha evitado mencionar a Jacques Audiard y al reparto de Emilia Pérez, la película que prometía arrasar en los Oscar pero que finalmente solo se llevó dos premios de las 13 nominaciones que tenía. "Yo no voy a hablar de mis compañeros ni de un director que yo amo con toda mi alma. Me han escrito desde Japón, donde están ahora mismo".
Tampoco ha profundizado sobre Ted Sarandos, CEO de Netflix, quien recientemente dejó abierta la posibilidad de trabajar nuevamente con ella. "Lo que tenga que decirle a Ted ya se lo diré".
"No represento a nadie, solo a mí misma"
Gascón ha reconocido que la polémica la ha afectado profundamente. "Estoy feliz por algunas cosas, jodida por otras, triste por otras y asqueada e irritada por otras". Lo que más le molesta es sentirse manipulada: "Hay un interés en que tienes que ser inmaculada porque represento a no sé quién. Pero yo no represento a nadie, yo solamente me represento a mí misma".