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Exclusiva doble: Ágatha Ruiz de la Prada deja a Patón y ya no vende su dúplex de La Castellana
- La diseñadora ha puesto punto y final a un noviazgo de tres años en plena tormenta mediática
- Ágatha Ruiz de la Prada, muy cabreada, le para los pies a Díaz-Patón en un improvisado cara a cara: "Te lo pido de rodillas..."
Martín Alegre
Agatha Ruiz de la Prada da un giro a su vida sentimental con la ruptura de José Manuel Díaz-Patón, su novio durante estos tres últimos años. Las declaraciones del abogado intentando defender a Ágatha cuando ella dijo que "vivía como una gitana, sin agua, luz", al entrar en su nuevo piso, todavía sin terminar, provocaron muchos comentarios contra la diseñadora, tachándola de racista o poco respetuosa con la etnia gitana. Lolita Flores fue una de las aludidas que le reprochó utilizar frases hechas que se dicen desde hace muchos años pero que debíamos desterrar de nuestro vocabulario.
Por su parte, el abogado estropeó todavía más la situación al considerar que Lolita, criticaba a Ágatha "para darse notoriedad y hacerse famosa", ignorando o despreciando que es una de la artistas más conocidas y populares del país. A partir de entonces, aunque Ágatha pidió excusas y fueron aceptadas por la familia Flores, recibió amenazas de muerte anónimas y por parte de Patón, todo fueron despropósitos, ya que el abogado le cogió gusto a los micrófonos y no paró de hacer declaraciones, encantado de escucharse. Hasta ese momento, había sido el acompañante de alguien tan conocido como la ex mujer de Pedro J. Ramírez; a partir de entonces, tuvo (o creyó tener) entidad propia y se fabricó su personaje. Y más cuando fue contratado como contertulio por La 1, de Televisión Española para el programa Mañaneros.
Patón hizo caso omiso a los ruegos de Ágatha de que tuviera "la boca cerrada" y seguía encantado de su flamante protagonismo. Ni se callaba ni tenía intención de hacerlo, aunque peligrara la relación, por otra parte, deteriorada desde el pasado verano, en que Ágatha se fue a su casa de Mallorca a finales de junio, mucho antes de sus fechas habituales, para poner tierra (o mar) de por medio. Y a su regreso no paró de viajar por motivos de trabajo en solitario, sin acompañante.
Díaz-Patón se resiste a ser y parecer como abandonado y sus declaraciones a la prensa sobre este asunto siguen siendo ambiguas con la esperanza de reconquistar a su novia, pero para Ágatha parece que ya es un asunto caducado. Su nueva casa de la calle de Serrano, contigua a su nuevo estudio, taller y tienda, que también acaba de estrenar, ocupan todo su tiempo. Cuando estos locales están a pleno rendimiento, Ágatha volverá a reunir en su showroom a sus amigos y seguidores, como en los principios de su carrera cuando hacía sus inolvidables reuniones semanales en su antiguo estudio en el barrio de Chamberí.
Por otra parte, después de poner a la venta por 7,8 millones de euros su fabuloso dúplex del Paseo de la Castellana, en el que vivió tantos años con Pedro Jota, una venta publicitada con una gran fiesta organizada por la agencia inmobiliaria que lo tenía en cartera, he decidido quedárselo y alquilarlo por una cantidad acorde a los altísimos precios de esa zona de Madrid. Esta propiedad se añade así al fantástico patrimonio inmobiliario de Ruiz de la Prada, propietaria de varios locales en Milán, tres en Nueva York, dos en París (todos ellos alquilados), su casa mallorquina en Costa de los Pinos, el nuevo piso de Serrano y la finca de más de 11 hectáreas en Brea del Tajo, no lejos de Madrid.