Estilo de Vida

El escritor Graciano Palomo, sobre Feijóo, 'la última esperanza azul del PP': "Tiene hechuras presidenciales"


    Ana Gómez Viñas

    Graciano Palomo, escritor, especialista en el centroderecha español y en la Transición y profesor de Géneros Periodísticos, vuelve al mercado editorial con Siete días de furia y puñales (Editorial La esfera de los libros), la crónica de la caída de Pablo Casado, ex presidente del Partido Popular, impulsada por los barones territoriales de su partido. Un ocaso retransmitido por los medios aquel pasado mes de febrero, que terminó con el final de la era Casado y el comienzo del mandato de Alberto Núñez Feijóo, considerado la "última esperanza azul del PP". Un paso hacia adelante, que el gallego, "no se atrevió a dar en 2018, cuando cae el Gobierno de Mariano Rajoy tras la moción de censura", nos deja caer Palomo.

    El autor de títulos como La larga marcha: de Rajoy a Casado. Los secretos de la derecha española e Iván Redondo: El manipulador de emociones nos recuerda aquellos días de febrero, "cuando se televisa el 'suicidio' en directo" del líder del PP: "Yo describo in side las dos reuniones clave que decapitaron a Casado, que fueron la reunión del comité de dirección del lunes 21 de febrero, con gente de su confianza. Un momento que queda reflejado muy bien en aquella frase de Pablo Montesinos cuando le dijo 'estamos muertos'; y finalmente, en aquella trágica madrugada del 23 cuando los barones apuñalaron sin piedad a Casado".

    ¿Cuál pudo ser el gran error de Casado? "Cometió muchos", nos cuenta. "El único periodista que estuvo cuatro horas con él fui yo y eso me permite hacer un ejercicio para la historia. Fue una conjura. Pero la conjura no es necesariamente mala. El habla de "un golpe de Estado" en el que se conjuraron tres elementos: el poder económico, el poder mediático y la ambiciones de los barones. Eso es lo que él dice y que yo recojo en mi libro, pero no significa que yo lo comparta. Más que error, ¿cuál era el flanco débil de Casado? Que no ganaba elecciones". Y remata con un rotundo "y el centroderecha no está para bromas (…) Casado no tiraba."

    Ante esa falta de tirón del ex presidente popular en las urnas, el autor explica que "no tiene hechuras presidenciales". Argumenta que "la gente no se lo tomó en serio nunca. Cometía errores. Llegó muy joven, con 36 años, y se fue con 41." El periodista reflexiona sobre los hechos que acontecieron el pasado febrero: "¿Cómo puede ser -este es el milagro- que un partido que estuvo a punto de desaparecer en ese momento, si Vox hubiera sido más inteligente, cuatro meses después Feijóo esté tocando La Moncloa? Es impresionante." ¿Qué sucede? Que estaba fallando el líder".

    Sobre la fortaleza de Feijóo, Palomo apunta: "Tiene muchas. La primera, que tiene hechuras presidenciales, la gente lo percibe como un presidente al que se le puede entregar el fondo de pensiones. Eso se percibe en las encuestas. Y tiene una enorme experiencia. Es un ganador. La mayor parte de la vida política de Feijóo (tiene 61 años) ha sido desde el poder. Tanto en los dos gobiernos de Aznar, como presidente de la Xunta de Galicia con mayoría absoluta cuatro veces consecutivas. Y tiene condiciones para ser comandante en jefe. Yo, que estudio milimétricamente cada paso que da, hace currar a un equipazo. Y esto es lo que no tenía Pablo."