Felipe de Borbón es el Padrino y dicen que hay una oferta que no podrá rechazar
- Dicen que el Rey tiene una boda en Alemania
Informalia
Nuestro Rey tiene como ahijado a su primo segundo Ernesto de Hannover Junior (sobrino segundo de su madre la reina Sofía). Ernesto ha anunciado recientemente que se casa el verano que viene con la mujer con la que convive desde hace más de seis años. ¿Irá Felipe de Borbón a esa boda o rechazará la invitación, si es que se confirma? Un detalle: el Rey tiene muchos más ahijados.
En El Padrino, la novela publicada en 1969 y escrita por el escritor estadounidense de origen italiano Mario Puzo, se cuenta la historia de una familia de la mafia siciliana asentada en Nueva York, encabezada por el patriarca, Don Vito Corleone. Paramount Pictures compró sus derechos y produjo la película dirigida por Francis Ford Coppola y estrenada en 1972. En la cinta, Marlon Brando (Don Vito), le dice a su ahijado Jonnhy Fontane que hablará con el productor de la película que prepara para que le dé un papel aunque no quiera: "I'm gonna make him an offer he can't refuse" (Le haré una oferta que no podrá rechazar).
El Padrino en esta otra historia, no tan sórdida, es Felipe de Borbón y Grecia, y la oferta que según se ha publicado no podrá rechazar el monarca será la de asistir como invitado a la boda de su ahijado, Ernesto de Hannover junior.
Los Hannover, emparentados con la Reina Sofía (Ernesto es primo carnal de nuestra emérita) no son los Corleone pero sí una familia muy notable y no siempre aplaudida o admirada. Y no porque Ernesto de Hannover sea el pintoresco marido de Carolina de Mónaco (con la que no convive desde 2009), ni porque tenga con ella una hija llamada Alessandra (hermana del contrayente). Su fortuna creció durante la segunda Guerra Mundial, cuando el padre de Ernesto de Hannover se llevó su dinero a Austria y empezó a comprar empresas, algunas de la cuales pertenecían a judíos alemanes expropiados por los nazis.
Aun así, no son mafiosos. No obstante, estamos seguros de que aunque el rey de España rechazara la presunta invitación a la boda de su ahijado, nadie le pondría una cabeza de caballo en su cama del Palacio de la Zarzuela. Pero, ciertamente, como padrino del novio, no sería raro que asistiera si su agenda se lo permite.
Además, Ernesto de Hannover Junior no es precisamente la viva imagen de su singular y revoltoso padre, al que en Alemania le llaman El Príncipe del Corazón, casado aún hoy legalmente con Carolina de Mónaco. Ernesto el joven es hijo del primer matrimonio del polémico aristócrata que orinaba en público y pegaba a los fotógrafos, pero es muy serio, viste elegante traje en la City londinense, donde vive con su novia diseñadora desde hace seis años. Y es discreto. Se dedica a administrar la inmensa fortuna de su padre (no inferior a 200 millones de euros, solo en su cuenta personal) y el castillo de Marienburg, en la Baja Sajonia, la joya de la corona de la familia con la sangre más azul de Alemania y sin duda una de las más nobles del planeta.
Ernesto el joven anunció hace poco más de un par de semanas que se casa por fin, después de convivir más de un lustro, con la rusa Ekaterina Malysheva, hija de una adinerada familia checa (su padre mueve gas y petróleo desde Moscú), educada en la escuela más selecta de Praga, capaz de hablar en checo, inglés y por supuesto, ruso.
Dicen que Ernesto ha salido a su madre, la primera esposa de su padre, Chantal Holuchi, rica heredera de un multimillonario arquitecto suizo y sobre todo amiga de una mujer que marcaría su vida con el tiempo: Carolina de Mónaco, la íntima que se acostaba con su marido, un romance que casi toda Europa conocía excepto la propia Chantal. Luego el karma haría que Carolina tuviera que soportar ver a su marido exhibiéndose en público con una prostituta rumana de 26 años llamada Simona. Pero ésa es otra historia.
Volviendo a Ernesto de Hannover jr, faltaba por reseñar que entre sus virtudes está contar entre sus nueve padrinos con Felipe de Borbón, tal y como ha recordado Nuria Tiburcio en El Confidencial. No olvidemos que doña Sofía es prima hermana de Ernesto el Meón, puesto que la madre de la reina, y el padre de Ernesto eran hermanos.
El bautizo del primogénito de los Güelfos fue por supuesto en el Castillo de Marienburg (dos años después de la boda de sus padres, que también fue allí). El entonces Príncipe de Asturias asistió al evento para ejercer de padrino de su primo segundo, Ernesto Junior. Su madre, la Reina Sofía, decidió que fuera su hijo y no ella, quien había sido propuesta como madrina, quien asumiera tal privilegio, honor y responsabilidad.
Por ese vínculo, algún medio se aventura a afirmar que el Rey de España, como padrino del novio, no podrá rechazar la oferta de asistir a una boda que sin ninguna duda será la boda del verano que viene. Otra cuestión es que realmente sea así, ya que, como vamos viendo en los últimos años, la Reina Letizia no es excesivamente dada a prodigarse en en baños de sangre azul tan notorios. Y por otras razones.
A favor están la categoría nobiliaria de la familia del novio, que convertirá a Katya la diseñadora en princesa de Gran Bretaña e Irlanda, y sucesora natural de Carolina en la Casa de Hannover, los vínculos de sangre azulada que rodean en enlace, las relaciones personales y profesionales de los asistentes, el nivel económico y social... No sería de extrañar que el padrino del joven de 33 años no quisiera perderse una cita como ésa. Pero ni sabemos fecha exacta, ni podemos confirmar que nuestro Rey y su esposa estén invitados y, por supuesto, que puedan, quieran o deban asistir. No obstante, seamos sinceros, lo estamos deseando.
Pero claro, el Rey puede crear un precedente si acude a las bodas de todos sus ahijados y tiene varios, aparte de Ernesto:
Felipe López Sánchez, un asturiano de 26 años, también es ahijado del hoy rey Felipe VI. En 1990, el entonces príncipe de Asturias se ofreció a apadrinar al primer niño que naciera en San Esteban de Cuñaba, una pequeña localidad de los Picos de Europa que se estaba quedando despoblada. Otros ahijados del Rey son Constantino Alexios, hijo de su primo Pablo de Grecia y Marie Chantal Miller, Isabelle de Orleans, hija del príncipe Charles Philippe de Orleans y la portuguesa duquesa de Cadaval, Luis Gómez-Acebo, hijo de su primo Beltrán, María, hija de su prima Simoneta Gómez-Acebo y José Miguel Fernández Sastrón, Ingrid Alexandra de Noruega, primogénita de Haakon, Vicente de Dinamarca, el varón de los mellizos de Federico y Mary Donaldson, y Álvaro Fuster, hijo de su amigo Álvaro, además del ya citado Ernesto de Hannover.
O sea, que le quedan al Rey unas cuantas bodas si es que va a las de todos sus ahijados. Eso sí, Ernesto es mucho más mayor.