Felipe y Letizia aparecen por sorpresa en el último concierto homenaje a su reinado y muestran su lado más romántico

Revuelo en la Plaza Mayor de Madrid. A última hora de este miércoles, 18 de junio, la Guardia Real y la Unidad de Música de la formación militar se disponían a ofrecer el último concierto homenaje al reinado de Felipe VI y Letizia cuando una llamada avisaba de la improvisada asistencia de los Reyes, que no tenían en su agenda más actos que la entrega de Premios Internacionales de Periodismo 2025. Los padres de Leonor y Sofía se han dado un auténtico baño de masas, entre vítores y aplausos del público congregado, y han agradecido el cariño con mucha simpatía y unas imágenes para el recuerdo.

Y es que son pocas las ocasiones en las que podemos ver a Felipe y Letizia en un ambiente distendido y alejado del protocolo. Este miércoles, los reyes han olvidado por unos minutos las formalidades y han disfrutado del espectáculo como dos aficionados más a los que se les escapaban los gestos de cariño: una mano agarrada a la cintura, una sonrisa, una mirada... Complicidad que no pasa desapercibida y que encandila a los testigos de la misma.

Los reyes se acercaron al escenario para saludar a la Unidad de Música de la Guardia Real, a los que agradecieron su trabajo, y también al público allí congregado. No pudieron tomarse demasiadas fotos pero sí saludaron a todos los presentes y charlaron con ellos muy sonrientes.

Felipe y Letizia llegaban a la Plaza Mayor directos desde la Casa de América. A la reina no le ha dado tiempo a cambiar el outfit y la hemos visto, de nuevo, con el mono de Hugo Boss que había estrenado unas horas antes, un básico de armario que se ajustaba a su figura y que ha combinado con una pulsera de oro y diamantes que llevaba más de 10 años guardada en su joyero. Se trata de una pieza clásica de la firma Perodri que lució por última vez cuando todavía era Princesa de Asturias y que, en esta ocasión, ha combinado con pendientes de PDEPAOLA, unos aros asimétricos realizados en plata bañada en oro amarillo con un colgante de nudo fluido engastado con pavé de circonitas. Su precio es de 350 euros y se encuentran a la venta en la web de la firma.

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