El cumpleaños de Juan Carlos I ve la luz dos semanas después en la portada de Hola en un reportaje firmado por Laurence Debray
Informalia
No sabemos por qué pero el reportaje del 87 cumpleaños del Rey Juan Carlos ha tardado dos semanas en ver la luz. La espera sin embargo ha valido la pena. Tanto el texto como las imágenes que publica la revista Hola están firmados por Laurence Debray, la periodista y escritora francesa amiga del antiguo monarca que ya entrevistó para la misma revista a la infanta Elena hace un mes. Debray de momento ha tenido que comerse la biografía que se anunció de don Juan Carlos, o al menos aparcarla o aplazar su publicación. Pero puede estar contenta con este premio de consolación que el semanario donde firma su trabajo habrá sabido recompensar generosamente, porque además de tratarse de un interesante documento, es una exclusiva que solo puede verse en esa revista y no en otras.
Lo que vemos y leemos en gran medida confirma lo que ya avanzó en su día Informalia: el 87 cumpleaños del Rey Juan Carlos no parece grotesco como aquel otro de hace un año que también fue portada de Hola con Su Majestad cortando un pastel y con el escudo de su Casa y otros detalles. Esta vez, como ya adelantamos incluso antes del 5 de enero, la celebración ha sido más entrañable que ostentosa: un abuelo con sus nietos y sus hijas y un grupo de amigos y leales, sin Los Del Río, sin la presencia de ninguna ex amante, como se llegó a decir, y en un magnífico hotel pero no en su residencia.
La autora aporta algún dato como el que nos informa de que don Juan Carlos no viene más a Madrid porque le rompe el corazón no poder pernoctar en su casa, en Zarzuela, sino en un hotel, como parece que dispuso su hijo hace años, cuando el emérito se "expatrió", expresión usada por Debray en Hola. Eso se decidió justo después de que Felipe VI le retirara su asignación, un gesto que en términos económicos no es tan importante (unos 200.000 euros al año) pero que sí supone un acto cargado de significado y simbolismo.
Juan Carlos echa de menos Madrid, sobre todo, dice la firmante, a su hermana "Margot", si bien como todo el mundo sabe Su Majestad visita con cierta frecuencia Sanxenxo para hacer regatas o la capital si la ocasión lo requiere, como la boda de su sobrina nieta con el alcalde Almeida o para el 60 cumpleaños de su hija Elena el año 2023.
Por lo demás, lo que cuenta Laurence Debray en Hola es que un grupo de treinta amigos hizo el viaje para acompañar al Rey, como el año anterior, cuando, por primera vez desde su expatriación a los Emiratos hace cuatro años, organizaron una celebración familiar y amistosa con motivo de su cumpleaños. Dice que algunos no pudieron asistir debido a problemas de salud o compromisos familiares, pero que han prometido hacerlo el próximo año.
Cuenta que el objetivo de la celebración era "romper el aislamiento en el que el Rey se encuentra desde que rehízo su vida en una pequeña isla frente a Abu Dabi", según relata la escritora. Allí cuenta con la compañía de su nieto Froilán, recuerda y que el antiguo monarca recibe visitas esporádicas y espera con ilusión las de sus hijas. Recalca que su viajes a España "son cada vez más escasos y breves, limitados a eventos como bodas o funerales". "Alojarse en un hotel como un turista ocasional le resulta doloroso y prefiere no interferir en la vida de su hijo ni en el funcionamiento de la Corona. Es un precio alto para alguien que dedicó su vida a España y que siempre ha llevado al país en el corazón. No puede pasar la Navidad en familia, en su hogar, pero no deja que la amargura lo venza", explica.
En la víspera de este cumpleaños, dice la revista, Juan Carlos estuvo rodeado por el afecto de sus hijas y nietos, y recibió "conmovido" los besos y felicitaciones de sus seres queridos en una cena el día 4. Pasada la media noche, sopló las velas y sospechamos que pensó un deseo. Pero no sabemos cuál.