Aunque los inversores parecen estar pasando por alto el consejo de los analistas, lo cierto es que el número de recomendaciones de venta que acumulan los títulos de Bankia es el más elevado desde mediados de 2015. En total, 12 expertos consideran que lo más oportuno es desprenderse de las acciones de la entidad, lo que significa el 41,4% de las casas de análisis que la siguen.
Pese a ello, sus títulos acumulan una subida en el parqué desde el pasado 1 de enero cercana al 11%. Algo que ayuda a que la firma se encuentre sobrevalorada para el consenso de mercado que recoge Bloomberg ya que cotiza en los 4,3 euros y sitúa su precio objetivo en los 4,2 euros, un 2,6% por debajo.
Berenberg es una de las casas de análisis más pesimista con la entidad ya que, además de ser una de las recomendaciones de venta que acumula, también estima que su valoración justa en el parqué está en los 2,7 euros. Algo que, pese a estar 12,5% por encima de su valoración anterior, significa que Bankia tendría que corregir un 37,2% para cotizar en su valoración justa en el parque.
Desde Bankinter se hacen eco de cómo el incremento de la valoración por parte de Berenberg se debe a la adquisición de Banco Mare Nostrum (BMN), al tiempo que el consejo de venta está justificado porque esperan que su cotización en bolsa sea bajista.
No comparte esta opinión Carlos Almarza, analista de Ecotrader, ya que indica que "aunque su cotización ha encontrado freno en los altos de mayo, es cuestión de tiempo que los supere y retome su tendencia alcista". Al mismo tiempo, el experto señala que "los mínimos vistos en los 3,92 euros son el suelo de su consolidación y abriría una ventana de compra a corto plazo si da la señal de fortaleza de superar los 4,46 euros por acción". El valor, que forma parte de la tabla de seguimiento de Ecotrader desde diciembre de 2016, acumula una rentabilidad superior al 20,5%.
Desde Berenberg señalan cómo el mercado espera que el incremento de los tipos de interés en Europa provoque un importante crecimiento del beneficio por acción de la entidad más allá de 2020. Por ello, indican cómo se está descontando un escenario demasiado positivo ya que su previsión es que los tipos de interés se mantengan en estos niveles durante un tiempo prolongado.
Por último, también destacan cómo la capacidad de Bankia para recortar costes es cada vez más reducida al tiempo que aluden a la dificultad con la que cuenta el banco de alcanzar su objetivo de aumentar el crecimiento del crédito ya que la demanda sigue siendo débil tanto por parte de las empresas como de los consumidores.
Hace apenas una semana, Bankia hizo público que su beneficio neto fue de 514 millones de euros en el primer semestre de este año, lo que supone un incremento del 6,7% que en el mismo periodo de 2016. La entidad achacó estas buenas cifras a la "fortaleza" de los ingresos de su negocio tradicional bancario, junto al control de los gastos, las menores provisiones por la bajada de la morosidad y la caída de los adjudicados.
JP Morgan aprovechó su presentación de resultados para revisar su valoración sobre el banco presidido por José Ignacio Goirigolzarri y señaló que "continúa mostrando una fuerte generación de capital". Algo que, sin embargo, no fue suficiente para que la entidad estadounidense mejorara su recomendación que, hasta el momento, es de mantener.
La entidad sí que considera que Bankia tiene todavía potencial de revalorización. En concreto, sitúan su precio objetivo en los 4,41 euros, lo que implica un recorrido alcista para los próximos meses del 2,55% desde su cotización actual. Todo ello a pesar de que reconoce riesgos como "mayores pérdidas en los créditos o que el Estado español comience a reducir su participación en la entidad".