Tras varios intentos, finalmente el S&P 500 ha conseguido batir sus máximos históricos que encontraba en los 2.190,15 puntos. Y es que, el selectivo ha arrancado la semana con subidas superiores al 0,5%. De este modo, uno de los principales selectivos del mundo se une al Dow Jones y al Russell 2000.
Aunque todavía quedan horas de mercado en Wall Street, por lo que al cierre podría no confirmar un nuevo alto histórico, a media sesión había conseguido alcanzar casi los 2.197 puntos.