Hoy será la primera jornada en la que se podrá calibrar el impacto en los mercados de la ruptura de relaciones entre el Gobierno griego y sus acreedores para prolongar el rescate al país heleno.
Una reacción que tendrá que valorar el control de capitales o corralito impuesto por el ejecutivo de Tsipras de cara a los próximos 6 días. Es decir, hasta que al menos se produzca el referéndum convocado para votar las propuestas de las instituciones de cara a seguir recibiendo ayuda financiera.