Sesión de ganancias para el mercado norteamericano, con las que el Nasdaq 100 consigue asirse por el momento a su directriz alcista de corto plazo aunque parezca mentira. Situación de corto plazo: Sigue habiendo resistencias que batir, pero la sesión de ayer las puso al alcance de la mano. Como hemos comentado, sería completamente normal ver una corrección que sirva para ajustar parte de las últimas y fuertes subidas y aliviar la sobrecompra acumulada, que es notable en el Nasdaq. Pues a la luz de lo acontecido ayer en términos de precio y volatilidad no parece que el mercado esté por la labor. Como puede verse en los gráficos adjuntos, la volatilidad recae desde su directriz bajista y apunta a la zona de mínimo previo con posibilidad de continuidad. El Nasdaq, por su parte, se ha aferrado una vez más con unas y dientes a su directriz alcista principal y tiene a su merced la zona de altos anuales. Batirla dejaría a los vendedores sin su único argumento en precio. Situación tendencial: El patrón envolvente alcista desplegado en octubre sobre la media móvil de 200 semanas pone sobre la mesa un suelo antes de que se alcancen los 1.000 puntos del S&P500. La gran corrección del verano podría ser un acontecimiento que encaja a la perfección en una estructura de continuidad alcista, poco habitual y propia de mercados muy fuertes como el que habría nacido en marzo de 2009 y que llevaríamos corrigiendo lateralmente durante más de un año. Mantenemos la idea de que el mercado tiende a su máximos histórico para el conjunto; circunstancia que ya lograron el Russell 2000 y el Dow Jones Transportes a principios de ejercicio.