En la vida, todo es proporcional. A grandes caídas, fuertes rebotes. A sensibles rebotes, importantes correcciones.
Bajo este prisma, hay que señalar que el mercado norteamericano está fuerte y sus bancos también pese a todos los comentarios que haya sugerido el comportamiento de la semana pasada con la histórica caída intradiaria de Wall Street. Puede verlo de la siguiente forma: el mercado hizo en un día lo que debió haber hecho durante varias semanas. Premio para los que no lo vieron, y para los que nunca hacen nada por controlar su destino bursátil aunque estén mirando a todas horas, que se ahorraron el susto.