La cervecera de origen belga AB InBev (ABI.BR) viene desarrollando en los últimos meses un proceso de reestructuración alcista que tiene visos de continuar.
En las últimas semanas su cotización ha consolidado posiciones sobre los máximos de junio. Tras el traspié del pasado lunes desplegó una vela potencialmente alcista en forma de martillo, cuyo mínimo ofrece un stop a corto plazo al haber cerrado ya el hueco bajista abierto desde los 58,03 euros. Todo apunta a que seguirá evolucionando positivamente en su sucesión de máximos y mínimos crecientes, que es lo que define su tendencia alcista de medio plazo.
Los próximos objetivos destacables aparecen sobre los 65 y 70 euros, por lo que aún tiene un recorrido atractivo a corto plazo con stop bajo los mínimos del pasado lunes, los 54,70 euros.