Las fuertes subidas de ayer sirvieron para que IAG (IAG.MC), un título muy castigado por la pandemia, confirmara un giro alcista sobre los 1,21 euros, lo que sugiere que hemos visto un suelo y que estamos ante el origen de su reestructuración alcista.
Ya ha alcanzado el entorno resistivo de los máximos de agosto y septiembre, que es lo que tiene que batir para romper la sucesión de máximos y mínimos decrecientes y podamos confiar en mayor medida en reestructuración, pero todo apunta a que así sucederá. Es cuestión de tiempo.
Por encima de los 1,70 euros es cuestión de tiempo que veamos en próximos meses subidas hacia los 2,50 euros. Una eventual consolidación hacia sobre los 1,35 euros sería visto como una oportunidad para que aquellos que no estén posicionados lo hagan.