Situación de corto plazo:
Las bolsas europeas han cerrado la última sesión del mes de abril en positivo haciendo gala de fortaleza y en disposición de seguir avanzando. Aún no podemos dar por concluida la fase de consolidación que desarrollan en las últimas sesiones, pero no vemos ningún signo de debilidad que ponga en peligro un escenario de continuidad alcista. La principal referencia europea se encuentra en disposición de seguir avanzando hacia objetivos que manejamos en los máximos de 2017 en los 3.700 puntos. No habrá nada que ponga en jaque este escenario mientras un eventual recorte no profundice por debajo del soporte de los 3.410 puntos.