El Nikkei no escapa de la presión vendedora y comienza a perforar soportes clave de corto plazo como son los 15.380 puntos.
Al cierre ha mantenido este soporte a duras penas, cuya cesión definitiva confirmaría un claro patrón de giro bajista en forma de cabeza y hombros (hch) que abriría la puerta a un escenario potencialmente bajista en próximas semanas.
Por debajo de los 15.380 puntos no hay soporte digno de destacar hasta los 14.800/15.000 puntos.