Cierre de semana al alza en la bolsa japonesa, en la que el Nikkei se ha anotado un 0,44%, hasta los 8.863,3 puntos. Con todo, el selectivo nipón no ha cerrado el hueco que generó a la baja el lunes, lo que supone un débil contraataque.
En efecto, que se cierre el gap bajista que se abrió a partir de los 8.870 puntos es lo mínimo que se le puede exigir a la presión compradora para confiar en sus posibilidades de formar un rebote sostenible más allá de un par de jornadas.
Mientras no se cierre por encima de los reseñados 8.870 puntos habrá que seguir vigilando con atención soportes clave situados en los 8.645 puntos. En el chart adjunto puede verse como los 8.645 puntos son el origen del último impulso alcista en el Nikkei y la clavicular de lo que podría ser un patrón de giro bajista en forma de doble techo, cuya confirmación añadiría leña al fuego bajista.