Rebote en las bolsas europeas en el ecuador de sesión que no provoca cambios analíticos destacables ni es suficiente para alejar los riesgos de ver más caídas en próximas sesiones. En el más corto plazo no podremos hablar de fortaleza mientras no se superen al menos los máximos de la sesión del jueves, niveles como los 3.300 puntos de Eurostoxx 50, y tampoco sería suficiente para cancelar el riesgo de ver más bajadas. La pérdida de soportes de forma generalizada ha hecho que aumenten considerablemente las posibilidades de ver una caída del Eurostoxx 50 hacia los mínimos de junio o, cuando menos, hasta la base del canal que les dibujamos en el chart adjunto y que aparece por los 3.110 puntos. Desde ese primer soporte no nos sorprendería ver un cierto rebote, pero mucho nos tememos que luego podríamos ver una caída hacia la zona de los 3.000-3.050 puntos, que corresponde con los mínimos de junio y con el ajuste del 38,20% de Fibonacci de todo el rebote que nació en los mínimos de marzo. Mientras resista ese entorno hablaremos de consolidación, pero su cesión abriría la puerta a una corrección en toda regla.