Velar: Range Rover, además de todoterreno, también es SUV
Miguel Ángel Linares
Por si a alguien le quedaba dudas de que el SUV es el segmento del presente, y seguramente del futuro, llega ahora Land Rover para dejar claro que sus vehículos, aparte de ser, junto a Jeep, la marca de referencia en el 4x4, también aportan su granito de arena a los 'todocaminos' desde el lujo y la exclusividad que siempre ha caracterizado a la marca.
Y lo hace con el Velar, el cuarto modelo de la gama Range Rover, que se sitúa en la tercera posición entre sus hermanos en cuestión de tamaño, por detrás del Range Rover original y el Range Rover Sport, y por delante del exitoso Range Rover Evoque. Estamos, por lo tanto, ante un SUV/todoterreno de tamaño medio, que mide 4,80 metros de longitud (cinco centímetros menos que el Sport y 43 más que el Evoque), pero que disfruta de una generosa batalla de 2,87 metros (solo cinco centímetros menos que el Sport y 21 más que el Evoque), lo que se traduce en un amplio interior en el que pueden viajar cinco adultos con toda comodidad.
Diseño descaradamente minimalista
Los diseñadores del nuevo Velar no esconden desde luego sus cartas: juegan al minimalismo como filosofía, y lo aplican hasta los más pequeños detalles. Tanto en el exterior como en el interior, se ha tendido a la sencillez de líneas y ahorro de botones y controles, lo que da como resultado un diseño más relajado, mucho menos marcado que el Evoque. En el exterior destacan los elementos ópticos delanteros, de una finura extrema y tecnología Matrix-láser LED; detalles pulidos en cobre en los laterales; el techo, que puede pedirse con el color de la carrocería o en negro, panorámico corredizo o fijo; y sobre todo la parte trasera integral, que fluye hacia arriba acentuando el carácter "flotante". El aluminio juega un papel fundamental en la estructura y diseño del nuevo Velar. Un detalle a destacar son sin duda las manillas de las puertas, un diseño heredado del hermano deportivo de Land Rover, Jaguar, que se despliegan automáticamente cuando el coche se desbloquea, y que además cuentan con una sutil iluminación LED. Cuando el coche se bloquea, o cuando en marcha se superan los ocho kilómetros por ahora, vuelven a replegarse.
'Santuario' interior
Ese minimalismo del que hablamos se acentúa en el interior, de tal forma que la comunicación de la marca habla de una carácter de "santuario" por las formas relajadas, la ausencia de un número elevado de botones y controles –que además permanecen ocultos hasta que se conecta el vehículo– y una sensación integral de tranquilidad y comodidad. A ello aportan su granito de arena unos materiales de primera calidad, como no puede ser de otra forma en la marca, y especialmente la triple pantalla digital que preside el salpicadero. Además del cuadro de mandos, completamente digital, el Velar ofrece como novedad el sistema de infoentretenimiento Touch Pro Duo, que convierte la consola central en un centro digital con su doble pantalla de diez pulgadas cada una (la "normal" en la parte de arriba, en la que se pueden manejar la navegación, el contenido multimedia el teléfono; y una nueva en la parte inferior, justo encima de la famosa rueda de la transmisión de la marca, y que sustituye de forma digital al gran número de botones que presentan en esa zona los diferentes modelos del mercado. En esta pantalla, en la que solo hay dos ruedas "analógicas", se pueden manejar todas las funciones de climatización y todo lo referente a la tracción del vehículo, con gráficos HD que ayudan bastante a la hora de manejar el Velar fuera del asfalto.
En cuanto a sonido y conectividad, no hace falta casi ni decir que el Range Rover Velar se sitúa a la vanguardia de la tecnología en todos los aspectos, con cuatro sistemas de sonido con 23 altavoces desperdigados por todo el habitáculo, dos pantallas táctiles independientes adicionales para funciones de entretenimiento en los asientos traseros, con dos mandos a distancia y dos juegos de auriculares, puertos USB, HDMI, etc.
En lo que se refiere a tecnologías de ayuda a la conducción, en la pléyade existente destaca el frenado de emergencia autónomo, que actúa sobre los frenos del vehículo en caso de que una cámara estereoscópica situada en el parabrisas detecte una colisión inminente con otro vehículo, un obstáculo o incluso un peatón.
Cinco motores donde elegir
El nuevo Range Rover Velar llegará a finales de verano con seis propulsores, todos ellos equipados con cambio automático de ocho velocidades y tracción a las cuatro ruedas. En diésel disponemos de dos versiones 2.0 de cuatro cilindros, una de 180 caballos con 430 Nm de par, acelaración de 8,9 segundos y consumo ponderado de 5,4 litros; y otra de 240 CV con 500 Nm de par, 7,5 segundos de aceleración y 5,8 litros de consumo. El motor más novedosos de la gama del Velar es un diésel V6 3.0 de 300 CV, con 700 Nm de par, 6,5 segundos de aceleración y 6,4 litros de consumo. En cuanto a gasolina, disponemos de dos propulsores: un 2.0 de cuatro cilindros de 250 CV, par de 365 Nm, 6,7 segundos de aceleración y 7,6 litros de consumo; y la opción para los conductores más exigentes será el motor V6 3.0 sobrealimentado de 380 CV, 450 Nm de par, 5,7 segundos de aceleración y 9,4 litros de consumo.
Todo ello se traduce en una conducción extremadamente suave en carretera y poderosa fuera del asfalto, algo que la marca, por muy "SUV" que se declare (exigencias del mercado), no puede descuidar, pues iría en contra de la filosofía de Land Rover, y de la que todavía quedan muchos 'locos" del "off-road' que siguen buscando sensaciones fuertes más allá de carreteras y caminos 'fáciles'. En el primer contacto que hemos podido establecer con el Velar en carreteras noruegas, el vehículo ha demostrado ser muy confortable en carreteras pequeñas y reviradas entre los fiordos escandinavos, y un auéntico todoterreno cuando ha hecho falta, con una tracción y un comportamiento envidiables, tanto por caminos muy complicados como en grandes pendientes, en uno y otro sentido. Una gozada absoluta poder confiar en un vehículo que sabes que no te va a dejar tirado por muy empinada y agreste que pueda ser la senda por la que se circule (tuvimos ocasión de subir a lo más alto de una estación de esquí, sin prisa pero sin pausa, y con un comportamiento excepcional del Velar).
El nuevo Range Rover Velar, que llega a los concesionarios a finales de verano, cuenta con una horquilla de precios que se mueve entre los 60.250 y los 124.750 euros.