Los ocho coches con motor tricilíndrico más interesantes del mercado

Los motores de tres cilindros son cada vez más comunes. Muchos son los fabricantes que, en su lucha por alcanzar una mayor eficiencia, recurren a esta configuración como alternativa a los tetracilíndricos. En esta lista figuran algunos modelos que se sirven de este tipo de mecánicas.

Opel Corsa 1.0 Turbo Ecotec 115 CV

El Opel Corsa se ha puesto las pilas con la llegada de la nueva generación, que acaba de hacer acto de presencia. Nuevo diseño, más tecnología y mayor sensación de calidad es lo que ofrece ahora el pequeño alemán. Pero si todo esto es importante, más lo es aún la llegada del motor 1.0 Ecotec de tres cilindros y 115 CV, que ha supuesto un avance importante.

Si se compara con el resto de la gama de gasolina, es el que mejores prestaciones da y el que menos consume. Tan sólo los diésel CDTi logran reducir el gasto. Además, vibra y suena menos de los esperado, y se asocia siempre a un sistema Start/Stop. Por todo ello nos parece una buena apuesta.

BMW 218i Active Tourer 136 CV

Por si no fuera suficiente con tener que aceptar un BMW monovolumen y de tracción delantera, ahora hay que hacerse a la idea de que también se puede mover con un motor de tres cilindros. ¿Un sacrilegio? ¿Ruptura de valores y de tradición en la marca? Puede, pero si se analiza con calma, esto en realidad no es más que una mera adaptación a los tiempos que corren. Lo cierto es que este propulsor de 1.5 litros y 136 CV no va nada mal. Consigue unos registros muy buenos, es bastante suave en su funcionamiento y puede tener cambio manual o automático. Su consumo oficial es de 4,9 litros a los cien. Una opción adecuada a las pretensiones del Serie 2 Active Tourer.

Peugeot 308 1.2 THP 130 CV

Perteneciente a la familia de motores Pure Tech de última generación, este tricilíndrico mueve al 308 realmente bien. Tanto, que la primera vez que uno lo conduce no acaba de creer que lleve algo tan pequeño bajo el capó. El caso es que tiene una capacidad de recuperación muy solvente, firma unos registros de 4,9 l/100 km y 109 g/km de CO2 (se ahorra el impuesto de matriculación) y para colmo, si se elige el Driver Sport Pack opcional, se puede modificar el sonido del motor que llega al interior para hacerlo más deportivo. Downsizing en estado puro este THP.

Audi A1 1.0 TFSI 95 CV

Y como no, también los modelos premium entran en este juego de miniaturizar los motores para estar a la última. En este caso es el Audi A1 el que monta un pequeño bloque de tres cilindros y 1 litro escaso de cilindrada (999 cc para ser exactos), que rinde 95 CV y que se puede asociar a un cambio manual o a otro automático de doble embrague. Tanto el A1 como el A1 Sportback disfrutan de este motor que releva al 1.2 TFSI 86, cuyas prestaciones son más que buenas. El coche se mueve con bastante soltura y su consumo es contenido siempre y cuando se pise con mimo el pedal derecho. Lo que no podemos decir es que sea todo lo sedoso que cabría esperar. O quizá sea que uno espera mayor finura en un coche como este, por el simple hecho de ser uno de los más punteros de su segmento. El caso es que si tuviéramos que elegir un A1, probablemente tendría cuatro y no tres cilindros bajo el capó.

Ford Fiesta 1.0 Ecoboost 100/125/140 CV

La firma del óvalo lleva ya tiempo metida en este negocio del downsizing con sus propulsores Ecoboost. El Fiesta ofrece un 1.0 con tres niveles de potencia, que van desde los 100 CV hasta los 140 CV del Red/Black Edition. Alguno pensará que es un motor muy apretado, pero lo cierto es que no sólo ha resultado ser fiable sino que ofrece unas prestaciones sorprendentes y suena mejor que la mayoría de tricilíndricos. Lo malo es que gasta bastante más de lo que anuncia el fabricante y esto sí puede suponer un problema.

Renault Clio 0.9 Tce 90 CV

El Renault Clio tiene en su gama un motor muy pequeño, de apenas 898 cc, que cumple con su papel gracias a unos generosos 90 caballos que mueven bien al conjunto. No podemos decir que sea el más apasionante de esta lista, pero sí lo comparamos con su equivalente diésel, el TCe sale ganando por su precio más ajustado. Eso sí, anda menos y gasta más que el citado dCi 90 CV, mientras la sonoridad en marcha de ambos está a la par.

Mitsubishi Space Star 120 MPI

El pequeño de la gama Mitsubishi llegó al mercado hace poco tiempo con unas cualidades que lo sitúan entre los mejores del segmento por su relación precio/espacio/equipamiento. Pero además, y aquí vamos a lo que nos ocupa, ha decidido confiar su oferta mecánica a dos motores tricilíndricos, de 1 y 1,2 litros, que rinden 70 y 80 CV. El más interesante quizá sea el 120 MPI, un motor que presume de una capacidad de aceleración correcta (a pesar de ir asociado a una caja de de cambios de desarrollos largos) y de unos consumos moderados. En este segmento de vehículos la insonorización no está tan cuidada como en otros, así que el sonido de los tres cilindros se hace patente en todo momento, pero esto algo a lo que uno se acaba acostumbrando.

BMW i8

Aunque es un híbrido, pensamos que el BMW i8 debe estar en esta lista porque su motor de combustión es el máximo exponente de la tendencia downsizing. Se trata de un 1.5 tricilíndrico que alcanza los 230 CV gracias a la sobrealimentación y que es capaz de emitir un sonido bastante deportivo. El sistema de propulsión se sirve también de un motor eléctrico que eleva la potencia total hasta los 362 CV, lo que permite alcanzar unas prestaciones sobresalientes. Un modelo adelantado a su tiempo, que fija su consumo medio oficial en 2,1 l/100 km.