La falta de chips provoca que Brasil supere a España como octavo productor mundial de vehículos

La escasez de semiconductores sigue su curso y sus consecuencias se han hecho notar durante los meses de verano en las factorías españolas.

En los ocho primeros meses del año se han ensamblado en las factorías españolas un total de 1.414.240 unidades, lo que supone un aumento del 11% en tasa interanual, pero un descenso del 25,3% en comparación con los datos registrados en 2019, un año antes de la pandemia, según datos de la patronal de fabricantes (Anfac).

Esta situación ha provocado que España deje de ser el octavo productor mundial de vehículos en detrimento Brasil, país que ha ensamblado un total de 1.476.053 unidades, según datos de la patronal Anfavea. Esto supone que el país suramericano ha fabricado entre enero y agosto 61.813 vehículos más que España.

Si se compara en tasa interanual, la producción de vehículos en Brasil se ha incrementado un 32,9%, mientras que si se compara con los datos de hace dos ejercicios, la fabricación de vehículos se ha recortado un 26,6%.

España recuperó la octava posición como constructor de vehículos en febrero de 2020, tras haberla perdido en 2018 por el país latinoamericano. Desde entonces, las factorías españolas, al igual que las del resto del mundo, se han visto afectadas por la pandemia y por la falta de semiconductores.

La producción durante los meses de julio y agosto suele ser más baja que en otros meses por el periodo estival y de descanso. Pero, durante este 2021, la falta de aprovisionamiento de microchips está siendo el principal condicionante.

En los últimos cuatro meses, el ritmo de crecimiento frente al año pasado se ha reducido en 28 puntos porcentuales, un reflejo del impacto que el desabastecimiento de semiconductores está causando en el sector de la automoción.

Ante este contexto, las plantas españolas se han visto obligadas a paralizar líneas de producción y a realizar ajustes en los turnos, en función del abastecimiento de microchips. Las previsiones que maneja Anfac indican que el ritmo de fabricación de estos componentes no se ajustará a la demanda del sector de automoción al menos hasta finales del primer semestre de 2022.

Pero detrás de esta situación se encuentra también una caída de la demanda por parte de los socios europeos. En los meses de julio y agosto, tanto el mercado español (con una caída acumulada del 33,4% frente a 2019) como los principales europeos (Francia ha reducido sus entregas un 23,3%; Alemania, un -27%; Italia, un -20% y Reino Unido, un -27,5%), no consiguen recuperar las cifras de ventas registradas previas a la pandemia.

El director general de Anfac, José López-Tafall, ha explicado que "el desabastecimiento de los microchips en todo el mundo está provocando un fuerte efecto en cadena que afecta gravemente a la producción y al abastecimiento de nuevos vehículos. Lo que parecía un desequilibrio coyuntural se ha convertido en el escenario para los próximos 10-12 meses, al menos".

El directivo ha abogado por "apuntalar nuestra transformación hacia la industria 4.0 y, al mismo tiempo, impulsar el vehículo electrificado en España. Ante este reto hemos de trabajar juntos para implantar nuevas medidas que sostengan el nivel de mercado y producción, eliminar incertidumbres a los consumidores y, en paralelo, intensificar las medidas de electrificación e infraestructuras, pues el escenario es complejo".

Caída de las exportaciones

Como consecuencia de todo ello, en los ocho primeros meses del año, las exportaciones han registrado un fuerte descenso del 20,7% en comparación con 2019, aunque si se compara con los datos del año anterior, se logra un crecimiento del 12,5%. Hasta el mes de agosto, se han exportado un total de 1.217.400 unidades.

La reducción del ritmo de la producción causada por la crisis de los microchips junto con la baja demanda procedente de los mercados extranjeros, principalmente de los ubicados en Europa, están siendo de especial relevancia para la exportación de los vehículos "made in Spain".

En el último mes, las exportaciones a los mercados europeos, que han representado siete de cada diez envíos de los vehículos españoles, han reducido los envíos en un 32,4%.

Producción por fuentes de energía

En los ocho primeros meses del año, los vehículos electrificados, híbridos y de gas suponen uno de cada nueve vehículos fabricados y suman un total de 159.839 unidades, casi duplicando las cifras registradas en el año anterior.

Para el conjunto del año, los híbridos enchufables suman un total de 84.120 unidades ensambladas, todas de turismos, aumentando su producción un 119% respecto al año anterior y que representan el 5,9% de la producción total. Por su parte, los eléctricos puros, hasta el octavo mes acumulan 45.940 unidades, de las que 40.091 son de turismos, con un crecimiento del 109,1% en comparación con el mismo periodo de 2020. Durante 2021, el 3,2% de los vehículos producidos en España ha sido un vehículo eléctrico puro.