Red Bull se 'esconderá' para no dar pista de sus líneas maestras de cara a 2012
Apenas unos días después de iniciar la guerra psicológica de cara a la próxima temporada, asegurando que tendrán "un coche que seguirá alucinando", el ingeniero jefe de Red Bull, Adrian Newey, sigue jugando al secretismo y confirma que no probarán ninguna novedad de las desarrolladas para el coche de 2012.
En Red Bull preocupa que la prensa y los 'espías' del resto de equipos se percaten de cuáles van a ser las líneas maestras de su próximo monoplaza; temen perder la ventaja que le llevan a la competencia por un descuido en la estrategia de pruebas de las mejoras.
Un recelo que ya demostró el bicampeón del mundo de la escudería austríaca, Sebastian Vettel, durante el pasado Gran Premio de Singapur cuando, tras una salida de pista en los entrenamientos libres, dispuso que nadie moviera su coche sin las directrices de Red Bull. Al parecer, podían haber estado probando un nuevo suelo que contribuiría a compensar la prohibición de los difusores soplados en 2012, justo su principal fuerte durante todo este año.
Por ello, el jefe técnico del equipo ha explicado que, a pesar de que "todo nuestro desarrollo y la investigación están ahora centrados en el coche del próximo año", "si hay algo que podemos aplicar al coche de este año, se puede optar por hacerlo, pero siempre dependerá de si con ese damos alguna pista de lo que vamos a hacer en 2012", asegura Newey en declaraciones recogidas por Marca.
El conservadurismo de Red Bull contrasta, por otro lado, con la sobreexposición de Ferrari, que ya durante el pasado Gran Premio de Corea probaron en el F150º Italia un nuevo alerón diseñado para la evolución del coche de 2012. De hecho, Fernando Alonso mostró su enfado hacia la prensa por haber informado sobre esta novedad de su equipo, poniendo el foco, aún más si cabe, sobre la estrategia de Ferrari que persigue una revolución para la próxima temporada.
En cualquier caso, lo cierto es que la escudería de Maranello tiene que tomar más riesgos en sus planificación a partir de ahora, si quieren recortar la abrumadora diferencia que les separa del coche ganador de Adrian Newey.