Otro paso atrás
El Gobierno aprobará este viernes una reforma vergonzosa sobre los convenios colectivos, porque demuestra que ha preferido renunciar a las reformas impopulares y echarse en manos de los sindicatos. La legislatura de Zapatero está vista para sentencia. Se trata de no soliviantar mucho al ciudadano para contener la sangría de votos en los próximos comicios. En fin, que da prioridad a sus intereses personales y políticos sobre las necesidades reales del país. Rubalcaba, al que todos ubican en una posición mucho más realista que Zapatero, calla y otorga. Si piensa que con esta actitud va a recuperar votos está muy equivocado. El presidente de Murcia arrasó en los últimos comicios pese a que sugirió la posibilidad de aplicar algunas tasas autonómicas. Los ciudadanos son más inteligentes de lo que creen nuestros políticos. Comprenden que ahora quizá es necesario una subida de impuestos o una reforma laboral estricta para recuperar la economía y la confianza de los mercados internacionales, a los que se les está acabando la paciencia. Hasta el presidente del Banco Central Europeo, Jean Claude Trichet, advirtió ayer que en el futuro se planteará seguir financiando a países que no puedan devolver sus préstamos. Ante la irresponsabilidad de nuestros políticos, no es de extrañar que crezcan movimientos como el del 15-M.