El Círculo de Empresarios lava su imagen
Después de la renovación en la patronal de Madrid, donde el ínclito Arturo Fernández fue sustituido por Juan Pablo Lázaro, otra institución empresarial intenta limpiar su imagen, muy deteriorada en los últimos tiempos. El Círculo de Empresarios madrileño eligió ayer a Javier Vega de Seaone en sustitución de Mónica Oriol. La ya felizmente ex presidenta del Círculo se distinguía por sus meteduras de pata continuas. Aún resuenan los ecos sobre sus recomendaciones desafortunadas acerca de la contratación de mujeres. Lo peor es que Oriol arrastraba el estigma de presidir la empresa de seguridad encargada del Madrid Arena, cuando se produjeron cinco muertes. Los jueces aún deben dirimir responsabilidades y la propia Oriol cesó a toda la junta directiva de Seguriber, probablemente en busca de responsabilidades, que sufre una pérdida constante de clientes desde entonces. Pero se olvidó de empezar por ella misma, quien naturalmente era la primera responsable de lo ocurrido. No era presentable tener a una empresaria con un pasado tan funesto al frente de la institución que pretende aglutinar a las empresas madrileñas de mayor reconocimiento. No conozco a Vega de Seaone, pero sólo el cambio habla ya bien de la gestión del Círculo.