El petróleo bajó un 3% a 61 dólares el barril el lunes, debido a que los robustos inventarios en Estados Unidos, contrarrestaron los planes de los miembros de la OPEP, Nigeria y Venezuela, de recortar su producción. El crudo ligero estadounidense cayó 1,88 dólares, a 61,03 dólares el barril, tras descender tanto como a 60,90 dólares, después que la firma BP dijo que durante el fin de semana había restablecido la producción de su yacimiento Lisburne en Alaska. El Brent en Londres retrocedió 2,03 dólares, a 60,45 dólares. BP cerró la semana pasada 30.000 barriles diarios (bpd) del campo tras descubrir una fuga de gas en un oleoducto. El gigante petrolero ha estado reanudando la producción en su enorme yacimiento Prudhoe Bay, en Alaska, luego que en agosto halló corrosión severa en un oleoducto. El restablecimiento de Lisburne se sumó al sentimiento pesimista del mercado causado por amplios inventarios estadounidenses, que han tumbado los precios del barril de crudo desde los máximos históricos de 78 dólares en julio, y han generado preocupación entre algunos miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Algunos operadores dijeron que los recortes programados por Nigeria y Venezuela tendrán un reducido impacto en los precios, a menos que productores más importantes de la OPEP decidan sumarse a la medida. El gobernador iraní ante la OPEP, Hossein Kazempour Ardebili, dijo a la agencia oficial de noticias IRNA, que su país apoyará cualquier paso que de la OPEP para devolver los precios a un nivel aceptable y lógico. Analistas encuestados por Reuters dijeron que el reporte sobre inventarios semanales gubernamentales que será difundido el miércoles mostraría un aumento en las existencias de destilados de 1,3 millones de barriles para la semana que culminó el 29 de septiembre, con las de gasolina con 900.000 barriles más.