La compañía ha presentado un beneficio neto en el cuarto trimestre de 447 millones de euros, tres veces más que los 144 millones registrados en el mismo periodo de 2005. Sus ventas crecieron un 64% a 3.780 millones de euros debido a la fortaleza del negocio en Sudamérica y la región de Asia Pacífico. Los analistas esperaban un beneficio neto de 428 millones de euros, por lo que Ericsson supera las expectativas.