última EstrategiaRecomiendo comprar para la cartera agresiva EDREAMS, pero también podría ser válida la entrada para una cartera más tendencial.
La fiesta sigue en Wall Street, que espera los datos 'macro' sin muestras de cansancio
El cansancio que podía afectar al mercado después de tantas semanas consecutivas al alza no se ve por ninguna parte. Nueva York abrió ayer ligeramente a la baja tras las subidas del jueves y el viernes posteriores a la victoria electoral demócrata, subidas que llevaron al Dow Jones a nuevos máximos históricos.
Pero las caídas iniciales duraron poco: enseguida los índices enfilaron la senda alcista y, aunque ligeras, se anotaron nuevas ganancias al cierre.
El Dow Jones marcó un nuevo récord en 12.131,88 puntos, con un alza del 0,19%. El S&P 500 avanzó el 0,25% y ya se encuentra al filo de los 1.400 puntos. Finalmente, el Nasdaq volvió a liderar el movimiento con un tirón del 0,7%, motivado por la alegría de uno de sus líderes, Intel, que se anotó el 2%.
Oleada de datos 'macro'
Estas alzas se producen en vísperas de que empiecen a publicarse los importantes datos económicos que se esperan para esta semana; esta tarde conoceremos los precios industriales (aperitivo del IPC del jueves) y las ventas minoristas. Pero si los síntomas de ralentización de las últimas semanas no han detenido la fiesta, no tienen por qué hacerlo ahora.
Además, el mercado contó ayer a su favor con las palabras del presidente de la Reserva Federal de Dallas, que dijo que la economía está creciendo "enérgicamente". El dólar reaccionó a estas declaraciones con una subida que hizo caer al euro hasta 1,28 dólares, y los bonos hicieron lo propio con caídas en precio y subidas en rentabilidad hasta el 4,71% en EEUU.
También gustó al mercado la nueva caída del crudo por su teórico efecto benéfico en la economía, aunque también puede ser síntoma de desaceleración del crecimiento. El barril cayó por debajo de los 59 dólares.
Intel recogió con su subida una mejora de perspectivas para su sector por parte de Citigroup. Aparte, el sector farmacéutico retomó su subida pese a que los demócratas pueden reducir sus privilegios, y también hubo movimiento en las petroleras por la alianza de Hess, BHP Billiton y nuestra Repsol para desarrollar un nuevo yacimiento en el Golfo de México.