Suma y sigue: el Dow Jones marca otro récord a pesar de la victoria demócrata

Lo de todos los días: Wall Street sigue ignorando olímpicamente cualquier nube que enturbie su soleado futuro... y sigue subiendo. Ayer esa nube era la victoria demócrata en las elecciones legislativas. Pero si el mercado no se ha venido abajo con la brutal desaceleración del PIB, el derrumbe del sector inmobiliario o la caída de la productividad, tampoco iba a hacerlo por motivos políticos.

Es más, estos motivos ayer se volvieron a favor del mercado, en una sesión bastante curiosa. Comenzó a la baja, aunque las caídas eran mínimas. Cuando se publicó la victoria demócrata en Montana, estas pérdidas desaparecieron; y cuando Rumsfeld anunció su dimisión, los índices se vinieron arriba definitivamente. La teoría es que la dimisión acaba de raíz con un período de incertidumbre que se habría abierto tras una derrota republicana por culpa de Irak.

Resultado: nuevo máximo histórico del Dow Jones, que cerró en 12.176,54 tras subir otro 0,16%. El S&P 500 se anotó el 0,21% y se acercó un poco más a su récord, y el Nasdaq encabezó las alzas con un 0,38%.

En el resto de mercados, tampoco hubo un impacto apreciable del resultado electoral. El dólar, después de su reciente batacazo, apenas se movió, y el euro se situó en la zona de 1,276 dólares, Los bonos continuaron su escalada en precio y su rentabilidad bajó al 4,63%. El petróleo subió después de que las reservas semanales crecieran menos de lo esperado, pero se quedó por debajo de los 60 dólares.

Donde sí se notó el asunto electoral fue en algunos sectores especialmente sensibles. Por ejemplo, varias empresas de investigación con células madre se dispararon por la perspectiva de que los demócratas eliminen las restricciones a esta actividad. También subieron las empresas de energías renovables, por la misma razón. Por el contrario, las compañías de defensa cayeron con fuerza ante la incertidumbre sobre la política del nuevo jefe del Pentágono y sobre posibles recortes a este gasto.

Tras el cierre, Cisco presentó unos resultados mejores de lo esperado, con un crecimiento del 28% en su beneficio neto. El valor, que se había anotado un 1% en la sesión regular, se disparó otro 3% en el after hours.