Alaska: "Yo hice un reality sin guion y en libertad... ¿Se podría hacer ahora un Alaska y Mario?"

Alaska no quería hacer un documental cronológico típico porque "ya tengo un Lazos de sangre". Su vida también la mostró hace años en un reality (Alaska y Mario, el mejor que se ha hecho en España sobre una celebrity). Además, ha protagonizado infinidad de entrevistas y portadas (como la de Interviú). Pero ha decidido abrirse en canal en Movistar Plus+ y "contarlo todo" porque le ofrecieron hacerlo sobre un tríptico que aborda las tres cosas que importan en la vida: salud, dinero y amor. El resultado son tres episodios de Alaska Revelada que Movistar Plus+ estrena este domingo, 15 de diciembre.

Cuando dices que en este documental lo vas a contar todo, ¿a qué te refieres? Porque ya eres muy conocida, has protagonizado infinidad de entrevistas, has tenido un reality...

Es un 'todo' más profundo, más personal. Creo que lo tengo todo contado, pero cada cosa en un sitio. Verlo todo junto es distinto. Y luego hay una cosa importante, ¿quién lo conoce todo? A lo mejor el hiperfán que se lee todas tus entrevistas lo sabe, pero el resto de la gente, que tiene una vida normal y no está preocupada por saber todo lo que dices en cada momento, no tiene esa visión. Para mí lo que le da intimidad es la forma de contarlo, no el hecho de contarlo o exponerte como en un reality o una entrevista en Tómbola. Esta forma de contarlo es más íntima y directa, aquí no tienes escapatoria.

¿Este reality te ha servido para cerrar heridas a nivel personal?

No. Me ha servido para darme cuenta de que las tengo cerradas, que está muy bien. Es como encontrarte con un novio antiguo y decir: 'Ya no me pone nada, fenomenal'. Pero hasta que no llega ese momento, no lo sabes. Pues con esto es igual: es ver que lo que he enterrado está en su sitio y no me causa nada.

Has dicho que te has visto frágil pero más poderosa de lo que creías. ¿Ha sido un ejercicio de autoconciencia?

Sí, porque por suerte tú no estás todo el rato haciendo esos ejercicios mentales en tu vida. Es verdad que es un ejercicio de autoconciencia porque te preguntan todo el rato por cómo te sentías, cómo te sientes, cómo eras y cómo eres... Y tienes que colocarlo todo. Pero creo que en su justa medida, esto está muy bien para hacerlo. Ahora vuelvo a cerrar y sigo adelante.

¿Por qué has decidido ahora y no antes hacer una docuserie sobre tu vida?

Por varias cosas. ¿Por qué hice Interviú cuando lo hice? Porque era el momento. Estaba fenomenal, estaba el reality, no tenía disco... No me gusta mezclar las cosas, porque parece que una cosa promociona a otra. Ahora estoy bien, interior y exteriormente. Tengo salud, dinero y amor. Mañana no sabemos lo que va a ser. Y, por otra parte, hacer el típico documental hubiera sido más de lo mismo. Yo ya tengo un Lazos de sangre, ya tengo un reality... ¿Qué más quieres contar desde ese punto de vista? No hay nada más que contar. Hay una hemeroteca que puede consultar el que quiera. Pero el hecho de cómo se planteó este proyecto, que no es una cronología de éxitos y fracasos, sino algo desde otro punto de vista, es lo que me hizo decir que sí. Y luego, trabajar con un equipo [Shine Iberia] de mi total confianza.

¿En qué programa te has sentido más desnuda? Porque en el reality abriste las puertas de tu casa, que es tu intimidad.

¡No me parece nada íntimo eso! Siempre digo que un Instagram es más íntimo que un reality. Y todos tenemos el mismo nivel de exposición. No me sentí nada cohibida con el momento reality. Y fue un reality de verdad, de los que grababas 12 horas al día. Se grababa todo sin esconder nada, todo el mundo participaba porque quería y no era una cosa guionizada. No era en plan: 'Ahora, vamos a hablar del amor'. No era eso. Pero no me sentí nada invadida. Me sirvió para una cosa: que me diera igual que me vierais sin maquillar, que es algo que hasta entonces llevaba fatal.

¿Crees que ahora hay muchos realities guionizados?

Yo ya lo noté en la quinta temporada de Alaska y Mario, porque había redactores que, que lo único que tienen que hacer es sentarse e ir apuntando lo que pasa, que nos decían: 'Bueno, podríais...'. No, podríais no. Esto no es un programa. Yo supongo que, como persona que los consume y los ha vivido, los huelo a distancia. También te das cuenta de una cosa: muchos realities se graban durante dos horas, como si fuera un episodio, y no es así. Hay que grabar todo el día y hay que ver qué sale.

¿Y crees que los realities de ahora se hacen con la intención de promocionar una imagen construida de la persona?

Imagino que cada cosa es distinta. Nosotros tuvimos la suerte de ser muy pioneros y de hacerlo en una cadena como MTV. Es como hacer este documental en Movistar Plus+. Hay cosas que al estar en el sitio que están dan una libertad absoluta porque no estás ni sometido a audiencias ni a debate posterior, que debe ser horrible. Había una libertad... ¿Se podría hacer Alaska y Mario hoy en día?

¿Se podría?

En la quinta temporada teníamos todo pixelado. Era aburridísimo de ver. Todo el rato los otros bebiendo cerveza pixelada, el tabaco pixelado... Creo que todo pertenece a su momento.

Eres un personaje transversal e intergeneracional. ¿Qué imagen crees que tienen de ti los jóvenes?

No lo sé, no tengo ni la menor idea. Tengo una cierta percepción sobre el reality, que quizás es una determinada parte de lo que los más jóvenes tienen de mí, aunque ya no son los más jóvenes, pero lo fueron en su momento. Luego, a lo mejor hay una visión más borrosa de lo que es el pasado. No lo sé, no puedo contestar a esto.

Colaboras en 'TardeAR' como tertuliana. ¿Te sientes cohibida para hablar de temas de actualidad?

No me siento cohibida, pero soy prudente. De repente todo salta por un lado que es inexplicable, y que no esperas porque no estás acostumbrado a que las cosas salten. Yo he hecho Pepi, Luci, Bom, con una lluvia dorada con 15 años... Y no estoy acostumbrada a que todo sea posibilidad de escándalo. Yo, que soy una persona cauta, me he vuelto más cauta a la hora de hablar.