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Todo lo que siempre quiso saber sobre la vida privada de Pedro Piqueras y le apetecía averiguar


Informalia

Pedro Piqueras es, sin lugar a dudas, uno de los rostros más reconocibles del periodismo español. Con más de cinco décadas de trayectoria profesional, el presentador albaceteño se ha mantenido como un referente en la televisión, especialmente durante los últimos 18 años al frente de los Informativos Telecinco. Sin embargo, a pesar de su amplia exposición mediática, ha sabido mantener su vida personal lejos del escrutinio público, un logro poco habitual en figuras de su calibre.

Recientemente galardonado con el Premio APM al Mejor Periodista del Año 2023, Piqueras ha dado algunos destellos de su intimidad, pero siempre desde un enfoque discreto y calculado. "Intento proteger a las personas que están conmigo. Hemos establecido un muro para preservar nuestra privacidad", confesaba en marzo durante su paso por el programa Planeta Calleja.

La familia Piqueras

En el terreno personal, el periodista comparte su vida con su novia, Esther Barriga, y su hijo Curro, quien reside en Londres. Si bien admite que su horario laboral le dificultó la conciliación familiar, ha tratado de estar presente en los momentos importantes. "Mi hijo, cuando era pequeño, le dijo al albañil que trabajaba en casa: 'Eso es trabajar, no como mi padre, que siempre está durmiendo'. No entendía que yo trabajaba toda la noche", contó con humor en Planeta Calleja. Aunque reconoce haberse perdido episodios importantes durante la infancia de Curro, asegura que su hijo jamás se lo ha reprochado: "Tengo un hijo maravilloso", afirmó.

Curro Piqueras, lejos de seguir los pasos de su padre en el periodismo, ha desarrollado una exitosa carrera como creativo publicitario. Graduado en Publicidad por la Universidad Nebrija, trabajó en agencias de renombre como JWT Madrid y McCann Worldgroup antes de mudarse a Londres en 2019, donde actualmente es Director Creativo Ejecutivo de DUDE London, una agencia que trabaja con marcas como Netflix, Nike y Spotify. Sobre su padre, ha dicho: "Para mí, siempre fue alguien muy humilde y con un gran sentido del humor. Pero, sobre todo, alguien a quien he admirado cada día". Estas palabras las pronunció al entregarle a Piqueras el Premio Jesús Hermida por su trayectoria, un momento cargado de emoción.

Antes de su relación con Esther Barriga, licenciada en Farmacia y Veterinaria, Pedro Piqueras estuvo casado con Ana, la madre de Curro, con quien contrajo matrimonio tres años antes de iniciar su carrera en Televisión Española. Aunque el matrimonio terminó en separación, Piqueras mantiene una visión positiva: "He tenido otra relación no matrimonial que es como si lo fuera".

Más allá de los platós

Fuera de su faceta profesional, Piqueras es un hombre lleno de intereses y pasiones. Su amor por la música se hizo evidente en noviembre de 2022, cuando publicó en Instagram un vídeo tocando el piano en compañía de su perra Violeta. Su hogar, una vivienda al norte de Madrid diseñada por el arquitecto Otto Médem, es su refugio personal. Allí, en un despacho decorado con libros, fotografías y premios, disfruta de la tranquilidad de la sierra y del contacto con la naturaleza.

Piqueras también es un viajero incansable. Tras dejar los informativos, aprovechó para desconectar en destinos como la Patagonia chilena, la Sierra de Albarracín, Croacia o Gran Canaria. A pesar de sus experiencias cosmopolitas, su conexión con Albacete, su ciudad natal, sigue siendo inquebrantable. "Mi infancia fue muy de pueblo: campos de trigo, un río, una huerta… Todo eso forma parte de mí", explicaba en una entrevista.

En el programa Planeta Calleja, mostró su interés por la naturaleza mientras recorría el volcán de La Palma. "He tomado afición a respirar aire puro", decía, reflejando su deseo de mantener una vida más sencilla y cercana al entorno natural.

La "jubilación activa"

Aunque en 2022 dejó su puesto como presentador titular de los informativos, Piqueras no ha cortado completamente sus lazos con el periodismo. Colabora esporádicamente en programas de Radio Nacional, como No es un día cualquiera, y regresa ocasionalmente a la pantalla para cubrir eventos puntuales. "Cuando veo los informativos, me gustaría estar ahí, pero los jóvenes merecen su espacio", confesó con humildad.

Sin embargo, Pedro Piqueras no es inmune a la nostalgia. Su breve regreso a Telecinco para informar sobre los efectos de la DANA en España lo reconectó con la actualidad, un ámbito que sigue siendo su verdadera pasión. "Ver a la Reina con barro en la cara y al Rey tratando de explicar lo inexplicable… Ha sido uno de los momentos más duros que he presenciado en democracia", comentaba sobre el impacto de la catástrofe.

Un legado de admiración

A sus 68 años, Piqueras combina una vida profesional estelar con una rica vida personal, marcada por su amor por la familia, la música y la naturaleza. Su habilidad para mantener un equilibrio entre su faceta pública y privada es un reflejo de su carácter reservado, pero también de su gran humanidad.

Ahora, desde su "jubilación activa", sigue mostrando la curiosidad que lo ha definido como periodista y el sentido del humor que lo caracteriza como persona. Y aunque ya no esté todas las noches en los hogares españoles, Pedro Piqueras sigue siendo, para muchos, el referente indiscutible de la credibilidad y la cercanía en la televisión.