Gemma Nierga pide socorro a Belén Esteban para levantar la maltrecha audiencia de 59 segundos: Sálvame
Informalia
La televisión pública vuelve a abrir sus puertas al fenómeno Sálvame, ese universo de personajes y polémicas que, pese a su aparente ocaso, sigue siendo un filón mediático allá donde pisa. Tras las recientes incursiones de Belén Esteban, María Patiño y Kiko Matamoros en programas de la competencia, ahora es Gemma Nierga quien toma el relevo y lanza un llamativo guiño a la de Paracuellos.
Es un movimiento acorde con las obsesiones y gustos del próximo presidente de RTVE, José Pablo López, que ya quiso a Belén Esteban cuando fue director de Contenidos, lo que le supuso una bronca con quien era su jefa.
Ahora, como antesala de la salvamización de la Corporación Pública, Nierga propone ensanchar la tertulia política con una mezcla humor y nostalgia. Tal vez la sorprendente decisión sea fruto de la desesperación por revitalizar 59 segundos. La cuestión es que la periodista catalana ha invitado públicamente a Belén Esteban a participar en el emblemático formato de debate. La propuesta surgió a raíz de un cómico montaje del programa satírico de TV3, Alguna pregunta més? (APM?), en el que la ex de Jesulín tuvo dificultades para pronunciar correctamente el nombre de la periodista catalana. "No sabes cómo te entiendo, Belén. Cuando un nombre se nos atranca, nos bloqueamos. Te espero en 59 segundos", escribió Nierga en su cuenta de X, acompañando el mensaje con el fragmento de humor.
Este gesto, más allá de la anécdota, tiene una clara intención: inyectar frescura y atraer nuevas audiencias al espacio, que desde su regreso no ha logrado recuperar el brillo que lo caracterizó en sus años dorados. Aunque 59 segundos siempre se caracterizó por ser un programa serio, centrado en el análisis político y social, el regreso de rostros mediáticos como Belén Esteban podría suponer un giro estratégico para captar la atención del gran público.
Del circo mediático al debate público
La figura de Belén Esteban, icónica en el panorama televisivo, ha demostrado una inusual capacidad para adaptarse a formatos que van más allá del sensacionalismo. Su reciente paso por Col·lapse de TV3, donde sorprendió con reflexiones personales y un tono más sosegado, sirvió para confirmar que la princesa del pueblo tiene aún mucho que ofrecer fuera del plató de Sálvame. No es de extrañar, por tanto, que Gemma Nierga haya visto en ella una oportunidad para inyectar vida al veterano espacio de debate.
Sin embargo, las críticas no se han hecho esperar. Para algunos, la posible participación de Esteban en 59 segundos representa un intento desesperado por ganar audiencia a costa de desvirtuar el espíritu del programa. Otros, en cambio, ven la jugada como un inteligente movimiento de apertura hacia nuevos públicos.
¿Un Sálvame en miniatura?
La dinámica de 59 segundos, con intervenciones cronometradas y la presión del micrófono que se retira, podría suponer un interesante reto para Belén Esteban, acostumbrada a explayarse sin límites en tertulias de larga duración. No sería difícil imaginarla debatiendo temas de actualidad con la misma vehemencia con la que defiende sus posturas en los platós de Telecinco.
Mientras tanto, las redes sociales ya han convertido esta propuesta en un fenómeno viral. Entre memes, mensajes de apoyo y opiniones divididas, parece que la invitación de Gemma Nierga ha cumplido su objetivo inicial: poner a 59 segundos en el foco de atención.
Si Belén Esteban acepta el reto, el histórico programa de debate podría vivir uno de sus momentos más mediáticos desde su regreso. La incógnita queda en el aire: ¿conseguirá este peculiar encuentro entre dos mundos tan distintos salvar las audiencias de 59 segundos? O, mejor dicho, ¿será Belén Esteban capaz de expresarse en menos de un minuto?