Exclusiva: Genoveva Casanova demanda a Lequio, Mediaset y Ana Rosa por los comentarios tras sus fotos con Federico de Dinamarca
- Pide algo más de 400.000 euros por una parte y alrededor de 800.000 más a Mediaset por la estimación de ganancias en los programas donde se habló de Genoveva
Sara Tejada
El juzgado de primera instancia número 16 de Madrid ha admitido a trámite la demanda presentada por Genoveva Casanova contra Alessandro Lequio, Mediaset y Unicorn Content, la productora de Ana Rosa Quintana, en respuesta a la difusión de comentarios y contenidos emitidos en diversos programas del grupo audiovisual tras sus fotografías en Madrid con Federico de Dinamarca y que, según la demandante, perjudicaron su imagen y su potencial y capacidad publicitaria. De acuerdo con la demanda a la que ha tenido acceso Informalia, Casanova argumenta que ella no es un personaje público, que jamás ha comerciado con su vida privada y que estos comentarios, emitidos en Vamos a ver y recogidos por otros espacios de la cadena, han generado dinero para los querellados y menoscabado sus oportunidades profesionales.
La controversia se origina a propósito de la publicación de las imágenes de Casanova junto a Federico de Dinamarca, entonces príncipe y hoy monarca, en la revista Lecturas hace más de un año. Aquellas sorprendentes escenas causaron una repercusión mediática considerable, no solo en España, sino también en Dinamarca, dado el estatus del príncipe y la expectación por la vida privada de la mexicana, ex esposa de Cayetano Martínez de Irujo y cuyas relaciones con el ex ministro José María Michavila o Gonzalo Vargas Llosa fueron también objeto de deseo de la llamada crónica social.
En su argumentación, Genoveva Casanova sostiene que los comentarios emitidos en los programas de Mediaset afectaron directamente su imagen pública y la percepción del mercado sobre su valor como figura pública, lo que a su vez se tradujo en una supuesta pérdida económica. Según la defensa de Casanova, esta afectación asciende a algo más de 400.000 euros por una parte, cifra con la que estiman el perjuicio sobre sus potenciales ingresos publicitarios, representaciones y contratos, y alrededor de 800.000 más a Mediaset por la estimación de ganancias en los programas donde se habló de Genoveva.
No obstante, fuentes de la industria señalan que el impacto mediático de esas fotografías supuso, al contrario de los expuesto en la demanda, un aumento significativo en la popularidad de Casanova en su momento, lo cual habría elevado su caché. "Genoveva Casanova se convirtió en una figura destacada de la vida social y fue muy solicitada para entrevistas y apariciones en eventos", comenta una fuente relacionada con el entorno mediático. Agrega que Casanova ha recibido invitaciones para participar en programas y eventos públicos, como fiestas patrocinadas adonde va gente con caché, es decir, cobrando por asistir y posar en un Photocall, "pero ahora con un caché mayor". A lo largo de los años, Casanova ha mantenido un perfil de relevancia en la vida social española, inicialmente, debido a su matrimonio con Cayetano Martínez de Irujo, miembro de una de las familias aristocráticas más reconocidas de España. Tras su separación, Casanova ha seguido siendo objeto de interés mediático, no solo por sus relaciones personales con figuras públicas, sino también por su participación en solidarias y de otra índole.
Expectativas y próximos pasos en el juicio
La demanda plantea, además, un debate en torno a la responsabilidad de los medios y la exposición mediática de figuras que, como Casanova, alegan no buscar activamente la fama, pero se encuentran inmersas en el interés público. El tribunal deberá analizar si los comentarios emitidos y su repercusión en la imagen de Casanova suponen un daño real a su vida profesional, evaluando además la legitimidad del reclamo económico. El juicio valorará y determinará la línea que separa el derecho a la intimidad, el honor o la propia imagen de la demandante frente al derecho de los medios a informar de hechos (como pasear junto a un rey o heredero en público) y sobre todo el derecho de los lectores a conocer lo que pasa con, por ejemplo, el heredero al trono de un país. "Las imágenes de un rey o un príncipe, con una mujer famosa, por la calle, o en lugares públicos, difícilmente pueden ser condenables", explica un jurista especializado en Fundamentales.
Los letrados que firman la demanda de Genoveva son Ángel Zamora González de la Peña y Alejandro Guerra Pérez y, de acuerdo con nuestras fuentes, es Cayetano Martínez de Irujo quien asume el todo o una parte de los honorarios de la defensa de su ex mujer. La demanda es por vulneración de los derechos al honor y a la intimidad. Genoveva considera vulnerados sus derechos fundamentales al Honor y a la Intimidad frente a las que considera "ilegítimas intromisiones" presuntamente cometidas por los demandados, a través del programa de televisión Vamos A Ver, presentado por Joaquín Prat. Genoveva Casanova sostiene en su demanda que ella "no pertenece ni ha pertenecido nunca al sector de personajes públicos que comercian con su vida personal". En su escrito, recuerda que ella "ha desarrollado su labor profesional en la empresa privada, organizaciones no gubernamentales y fundaciones". En el texto de la demanda, la mexicana asegura que ella "escribe la columna Cita con el arte en la revista Mujer Hoy", y que ha desarrollado "facetas como la fotografía, el modelaje, la actuación, y también la escritura, publicando su propio libro El llanto de los elefantes".
MasterChef Celebritiy, Mask Singer, El desafío...
En cuanto a las apariciones televisivas, la propia demanda reconoce que Casanova "ha figurado puntualmente en entrevistas o programas de televisión", pero matiza que "siempre al objeto de promocionar sus proyectos profesionales o humanitarios", ignorando por ejemplo su lucrativa participación en El Desafío, un contrato que, según varias fuentes consultadas, se cerró después del escándalo de las fotos, cuando la popularidad de Genoveva tocaba máximos. De hecho, el programa producido por Pablo Motos y ya grabado, convertirá en un par de meses (cuando se emita) a la amiga de Federico de Dinamarca en una de las estrellas del prime time de la cadena más vista de España, junto a celebrities como Victoria Federica Marichalar.
Recientemente, Genoveva también ha participado en el programa MasterChef Celebritiy (con famosos, por definición) en Televisión Española, emitido en 2023, y también en el programa Mask Singer, de Antena 3, emitido a finales del año 2020. También ha concedido reportajes a la revista Hola y no es de extrañar porque sus relaciones, además de ser la mujer de Cayetano, han sido con personalidades como el ex ministro de Justicia José María Michavila o uno de los hijos de Vargas Llosa. Pero ser fotografiada con el marido de Mary Donaldson cenando y paseando por Madrid la convirtió, obviamente, en una de las personas más famosas, más aún que antes, y sin duda el morbo de verla en un concurso es un reclamo para la audiencia, lo cual, a su vez, eleva su caché. Digan lo que digan.
La demandante recoge en su querella unas palabras de Luis María Ansón, íntimo amigo de su ex marido, el financiador de su Defensa. El ex director de Abc y académico, muy a favor de obra, declara en una entrevista recogida de un medio, que la mexicana "no ha querido estar en ese candelero, no, no ha querido. Lo ha aceptado, se ha llevado muy bien con nuestros compañeros que llevan esa prensa, que es una prensa muy difícil", dice. Pero el veterano periodista no explica nada de por qué Genoveva tenía caché por acudir a determinados eventos, por ejemplo o si en caso de ser anónima hubiera sido contratada por mucho dinero para participar en concursos como el citado Masterchef y otros. ¿Estaría en Antena 3 a partir de enero de no llegar precedida por una fama indiscutible y además lucrativa? ¿Y a qué precio?
Los demandados ya preparan su defensa y disponen de casi tres semanas para hacerlo. Fuentes cercanas a la productora de Ana Rosa Quintana aseguran que están tranquilos porque consideran que Genoveva ha sido respetada en todo momento y que desde luego es un personaje público. La parte demandante encuentra que lo que se pregunta Lequio en los programas citados en la demanda, sobre quién pudo haber filtrado la información que permitió a los paparazzi hacer el reportaje, no deja de ser una opinión argumentada: el italiano reflexionaba si la mexicana podría ser la gran beneficiada, dando a entender lo poco lógico que serían pensar en Federico de Dinamarca como origen de la filtración. Pero son comentarios que "se enmarcan", de acuerdo con las fuentes consultadas, "en el ejercicio de la libertad de expresión, ya que no se asegura nada".